El Congreso estadounidense se encuentra a punto de aprobar la primera emisión de bonos de guerra desde la Segunda Guerra Mundial, aunque muchos economistas opinan que lo único que hace falta para impulsar la economía es que la gente gaste más dinero. El departamento del Tesoro le ha dado una bienvenida más bien tibia a la idea de los bonos, aunque sus funcionarios destacan las "intenciones y el sentimiento patriótico" de quienes apoyan la legislación pertinente ante el Congreso. "Una economía fuerte es quizás nuestro bien más importante mientras continuamos con este esfuerzo", expresó la vocera Tara Bradshaw. "Esperamos que los consumidores ansiosos de poner su dinero a trabajar para la nación realicen las compras que planearon antes del 11 de septiembre, dado que el gasto de los consumidores es vital para la economía". El Senado aprobó su versión del anteproyecto de ley de bonos de guerra el mes pasado, como una enmienda al presupuesto anual del departamento del Tesoro. (AP)
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