Papeleras: no hubo conexión con Uruguay por seis horas

El canciller uruguayo, Reinaldo Gargano, condicionó la negociación a que se levanten los cortes

Los tres pasos fronterizos al Uruguay quedaron ayer cortados por asambleístas entrerrianos, en rechazo a la instalación de la pastera finlandesa Botnia en Fray Bentos, mientras el canciller uruguayo, Reinaldo Gargano, condicionó la negociación con Argentina a que se levanten los piquetes.

Horas después de que el canciller de España -país que facilita el diálogo entre las partes-, Miguel Angel Moratinos, anunciara un "diálogo directo" entre ambas naciones, Gargano reiteró la disposición de su país "al diálogo" con el gobierno de Néstor Kirchner.

Sin embargo, volvió a condicionar cualquier "negociación" al levantamiento de los cortes de ruta, que en los puentes Gualeguaychú-Fray Bentos y Colón-Paysandú se desarrolla por tiempo indeterminado.

En Concordia, mientras tanto, se interrumpió el paso de vehículos desde minutos antes de las 17 y estaba previsto liberarlo a las 22.

A partir de las 11, se realizó una "caravana náutica" que partió desde el Balneario Ñandubaysal, cerca de Gualeguaychú, y que llegó hasta la planta de Botnia, en el río Uruguay, pero siempre del lado argentino.

Minutos antes habían realizado un corte simbólico en el río Uruguay, donde los asambleístas desplegaron, en un tramo de 70 metros, 15 barriles que funcionaron como boyas unidos por cabos.

El canciller uruguayo ratificó su posición dura ante los cortes.