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 domingo, 04 de febrero de 2007  
Piden la reapertura de la causa por la muerte de una nena hace 11 años

Los padres de Marcela Brenda Iglesias, la niña de 6 años que murió aplastada por una escultura en el Paseo de la Infanta en 1996, reclamaron hoy a la Corte Suprema de Justicia que “se expida en forma favorable” ante el pedido de reapertura de la causa promovido por el procurador general de la Nación, Esteban Righi.

Además, solicitaron que la Legislatura porteña apruebe un proyecto con el que se busca cambiar la denominación del espacio público por el nombre de la nena, al conmemorarse mañana 11 años de su muerte.

“Queremos que la Corte haga lugar al pedido de la Procuración para que el caso no quede sin juicio oral”, remarcó en declaraciones a DyN Eduardo Iglesias, padre de la niña fallecida, en tanto adelantó que, el sábado próximo, a las 10, encabezarán junto a su esposa, Nora Ribaudo, un acto en recordación de la pequeña.

Iglesias dijo que “la causa lleva 11 años, por lo que es lo suficientemente antigua como para que se le dé prioridad”, y estimó que el máximo tribunal judicial “se expedirá en marzo o abril” próximos.

Marcela murió el 5 de febrero de 1996, al ser aplastada por una escultura de 270 kilos cuando se divertía en los juegos del Paseo de la Infanta, en avenida del Libertador al 3800 del barrio de Palermo, adonde había concurrido con guías y compañeros de una colonia de vacaciones del Banco Hipotecario.

Los abogados de la familia Iglesias aseguran que la obra de hierro estaba “mal soldada a la base” y ocupaba un espacio público “sin habilitación ni controles municipales”.

En la primera etapa de la causa penal, resultaron procesados el autor de la escultura, Danilo Danzinger; la dueña de la galería de arte, Diana Lowenstein; y los funcionarios de la Policía Municipal Héctor Torea, Antonio Mazzitelli y Juan Carlos Favale.

Todos los imputados enfrentaban cargos por “homicidio culposo y lesiones culposas”, cuando, en marzo de 2005, ante la sanción de una nueva ley de prescripción, la Justicia cerró el expediente y sobreseyó a los involucrados.

Los padres de Marcela apelaron la clausura de la causa y, en noviembre último, Righi dictaminó en favor de la reapertura del expediente. (DYN)
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