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 domingo, 30 de abril de 2006  
La corrupción en el gobierno

Miguel Campos, el secretario de Agricultura y Ganadería del gobierno de Kirchner, fue procesado por corrupto: el juez de la causa lo considera responsable de defraudación al Estado e incumplimiento de los deberes de funcionario público. Al fin la verdad sale a la luz. Desde el ARI, con Elisa Carrió a la cabeza, se denunció en junio de 2005 al funcionario hoy procesado por las groseras irregularidades que había cometido al distribuir la Cuota Hilton, que son los cupos de exportación de carne a Europa de mayor valor del mercado. Con todas las letras se dijo que Campos había violado varias normas, había hecho acuerdos espureos con diversos frigoríficos y había favorecido indebidamente a empresas como Subpga, Tomás Arias, Carnes Pampeanas, Arroyo y Translink. Por este motivo, el juez lo procesó y embargó. Celebro que la Justicia tome decisiones independientes, aun cuando éstas afectan al gobierno de turno. Pero esto no debe empañar el comportamiento del poder y la complicidad que muchos tuvieron y tienen con la corrupción que existe en la gestión de Kirchner. Cuando hace un año el ARI, a través de Carrió y quien firma esta nota, denunció a Campos por corrupto y presentó un fundado informe de 56 hojas detallando los hechos irregulares, muchos medios periodísticos optaron por callar. Las denuncias no tuvieron eco social. Muchos, ante las pruebas de corrupción, prefirieron ser cómplices. Nosotros elegimos otro camino. No será con nuestro silencio que se sigan robando el país. Los corruptos como Campos finalmente pagan, y la verdad, tarde o temprano, llega. No es en vano pelear por ella, y no queda en saco roto el esfuerzo de miles de argentinos por construir una alternativa a estas malas costumbres de la política argentina.

Andrés Domínguez

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