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 martes, 07 de febrero de 2006  
Un argentino fue detenido en Barcelona por intento de homicidio

Barcelona.- Un ciudadano argentino fue ingresado a la prisión de la ciudad de Barcelona, al norte de España, acusado de tentativa de homicidio y atentado a la autoridad contra un agente de la guardia urbana que fue herido de un piedrazo, hecho por el que también están detenidos dos jóvenes chilenos, indicó hoy la policía española.

Se trata de Juan P. G, de 22 años y argentino, quien junto a los chilenos Rodrigo L. H, de 21, y Alex C. A, de 25, fueron alojados anoche en la prisión de Barcelona por disposición del juzgado de Instrucción número 18 de esa ciudad, que decretó su prisión provisional sin fianza.

La acusación, ejercida por el Ayuntamiento (municipio) de Barcelona y el ministerio fiscal, había pedido prisión provisional sin fianza para esos tres jóvenes y otros dos de un grupo integrado por nueve acusados, aunque el juez decretó prisión para los tres primeros y dejó en libertad con cargos a los otros seis.

El episodio que motivó los arrestos ocurrió el pasado sábado durante una fiesta en un establecimiento ocupado del barrio La Ribera, de Barcelona.

Fuentes de la investigación informaron ayer a Télam que los nueve jóvenes detenidos por los incidentes de las “fiesta ocupa” habían pasado a disposición judicial y serán interrogados por el juez a lo largo del día.

Según el auto judicial, los tres jóvenes que ingresaron a prisión “participaron directamente en la pelea con los agentes de la Guardia Urbana y provocaron graves lesiones a uno de ellos”.

Los incidentes se desencadenaron cuando el pasado sábado un grupo de personas intentó acceder a una fiesta “ilegal” que se celebraba en un edificio ocupado situado en el número 55 de la calle Sant Pere més Baix, en el barrio de La Ribera, en el casco antiguo de Barcelona.

Pero los organizadores de la fiesta no permitieron que ese grupo entrara al inmueble.

Cuando la guardia urbana llegó al lugar, pidió a este grupo de personas, que se había quedado en la puerta de la fiesta, que no hiciera ruido en la calle, lo que originó una pelea con los efectivos, en la que se lanzaron piedras y otros objetos.

Según fuentes de la investigación, uno de los jóvenes que ingresó a prisión fue el que lanzó una piedra desde muy corta distancia que causó la fractura del cráneo del agente urbano, mientras que otro de los detenidos lo golpeó con otra piedra.

La Justicia identificó a los chilenos Rodrigo L. H y a Alex C.A como los autores materiales de las agresiones, mientras que no queda clara aún la implicación directa del argentino Juan P.G, quien acompañaba a los dos primeros.

De acuerdo con la declaración de los tres acusados, ellos llegaron al lugar cuando la pelea ya había empezado, y se disponían a abandonarlo cuando varios policías se les lanzaron encima y los golpearon con porras.

Los tres jóvenes que ingresaron a prisión negaron ante el juez los hechos que se les imputan y afirmaron que las piedras que causaron heridas al guardia urbano fueron lanzadas desde las ventanas del inmueble donde se celebraba la fiesta.

El resto de los implicados -cinco españoles y una alemana-, quienes denunciaron haber sufrido malos tratos mientras estaban detenidos, fueron puestos en libertad con cargos, al considerar el juez que su vinculación con los hechos es menor, ya que sólo se los acusa de atentar contra la autoridad.

En tanto, el guardia urbano herido, identificado como J. S. D., de 39 años, se encuentra “estable” dentro de la gravedad, indicaron hoy fuentes hospitalarias. (Télam)


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