Maidana y Villa empezaron a jugar el clásico

Mauricio Tallone / La Capital

En una ciudad tan futbolera como Rosario, el clásico es una verdadera religión. Por eso, las horas previas a un Newell's-Central siempre responden a una liturgia sagrada. Es que la caja de resonancia de un partido de esta relevancia incorpora la tensión que implica acariciar la gloria o darse una vueltita por el infierno.

Emanuel Villa y Julián Maidana saben de qué se trata. No necesitan que les expliquen lo que significa andar por la vida caminando por la cornisa. De ahí que sus gestos sintonizan en paralelo. Se prestan a la producción fotográfica con Ovacion sin caer en expresiones estridentes. Apenas simulan mirarse con ojos desafiantes y se animan a la cargada con un tono de voz casi inaudible. Ya salieron a la cancha, aunque el choque en el Coloso se juegue mañana.

"¿Cómo están para el jueves?", chicanea Tito, buscando que el defensor de Newell's le entregue algún flanco abierto para filtrarse.

"Quedate tranquilo, estamos bien. Con unas ganas bárbaras de lograr el triunfo que el hincha de Newell's está esperando", devuelve Maidana con un passing shot al mejor estilo Guillermo Vilas.

-¿Creen que estos dos clásicos pueden marcar un antes y un después en la relación con la gente?

-Estos partidos van a definir muchas cosas. No serán dos clásicos más porque si las cosas no nos salen bien, es muy difícil que la gente de Central nos perdone quedar eliminados de la Copa con Newell's. Por eso con los muchachos no manejamos otro resultado que no sea ganar (Villa).

-No creo que sea para tanto. Serán dos partidos importantes, pero tampoco vamos a jugar por la final de la Copa Libertadores. Además, si fuera tan decisivo como dice Tito, los hinchas de Central tampoco hubieran perdonado que Newell's ganó el clásico en el torneo que salió campeón. Es más, si ellos en ese partido nos ganaban o nos empataban, Newell's no se hubiera consagrado campeón (Maidana).

Los dos imaginan el partido de sus vidas o el gol que los conduzca a la posteridad. De esto precisamente sabe mucho más Maidana, que con el aquel recordado cabezazo en el Gigante supo caminar por las nubes y hoy ocupa un lugar privilegiado en el corazón de los hinchas leprosos.

"Aquel gol en cancha de ellos me marcó. Es que el hincha de Newell's nunca se olvidará de ese momento. Ojalá que en estos clásicos se repita porque sueño con hacer un gol en el Gigante y definir la eliminatoria", desliza el ex capitán leproso y le da pie a Tito para confesar su anhelo.

"Yo quiero convertir un gol en el último minuto del segundo partido. No me importa si lo hago de rebote o si la empuja un jugador de Newell's. Lo importante es que entre", admite sin el menor reparo.

-¿Coinciden con que es un desafío de 180 minutos?

-No, para mí el partido que hay que ganar es el primero. Estoy convencido de que el equipo que logre el jueves un buen resultado tendrá más posibilidades de clasificar (Villa).

-Para mí en los clásicos no influye la localía. Sería diferente si enfrente de Newell's estuviera River o Boca. Ahí sí el que pega primero, pega dos veces. Lo que sí creo es que estos partidos hay que ganarlos como sea. No importa la manera ni si el gol viene por jugada o pelota detenida (Maidana).

-Emanuel, ¿creés que es una ventaja que Central defina en el Gigante?

-Es importante porque vamos a tener casi todo el estadio a nuestro favor. Pero insisto, el partido que tenemos que ganar es el primero.

-Julián, ¿cómo te gustaría dejar afuera a Central: por penales o en los ciento ochenta minutos?

-A mí me gusta definir los partidos en la cancha. No quiero ganar por suerte.

-Sería bárbaro dejar afuera a Newell's por penales. Tendría un sabor especial, pero también sufriría mucho. A más de un hincha le agarraría un infarto.

-¿Lo único que importa es pasar el clásico?

-Sería muy importante ganar la Sudamericana porque es un torneo internacional. Pero a la gente de Central lo único que le interesa es dejar afuera a Newell's. Ese es el verdadero campeonato (Villa).

-Yo no sería tan terminante. Prefiero no adelantarme a los hechos. Después de que juguemos los dos partidos, te contesto esa pregunta. Eso sí, después de los dos partidos, no me imagino de otra manera que festejando (Maidana).

Maidana y Villa en el anticipo del partido más esperado por los rosarinos.