Jugar las copas es algo diferente

El Pato es el único de los tres que pudo festejar en un torneo internacional. Además de alcanzar la gloria en Boca, tanto en la Copa Libertadores como en la Intercontinental, el arquero de la selección integró el plantel que le dio el único título internacional a un club rosarino.

"Mi mejor triunfo con Central fue ganar la Copa Conmebol en el •95, que disfruté como cuando ganamos con Boca la Copa Intercontinental contra Milan", recuerda. Y añade: "Don Angel me había puesto de titular en el campeonato local y Tito (Bonano) atajaba en la Copa. Fuimos avanzando y cuando salimos campeones no existía ni el titular ni el suplente. Lo vivimos a fondo. Muy pocas veces disfruté como ese título. Teníamos que dar la vuelta y nos tiramos al foso. No completamos ni media vuelta pero caminamos un rato en el agua".

Marino nunca jugó un torneo internacional. Cata Díaz, en cambio, participó en dos ediciones de la Libertadores con la camiseta de Central. En la primera sólo jugó un par de partidos, pero en la segunda llegó hasta la semifinal.

"Jugar una copa internacional es algo muy diferente. Cuando me tocó no pudimos salir campeones, aunque la gente estuvo contenta por el trabajo que hizo el equipo", recuerda.