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 sábado, 17 de abril de 2004

Fuerte polémica por posiciones econtradas entre el oficialismo y la oposición
Los ediles de Granadero Baigorria analizan la situación del intendente
Se declararon en sesión permanente. Pedirán un informe a la jueza que decretó la quiebra a Ansoleaga

Marcelo Abram / La Capital

Granadero Baigorria. - El Concejo municipal se declaró en sesión permanente y resolvió solicitar un informe a la jueza Graciela Abraham para dilucidar la situación del intendente Miguel Ansoleaga luego de que el cuerpo tomara conocimiento del fallo mediante el cual el Juzgado Civil de la 6º Nominación decretó el pasado 1º de abril la quiebra del jefe comunal.

Durante la reunión que los concejales mantuvieron en la mañana de ayer surgieron dos posiciones encontradas acerca de la interpretación sobre el texto de la ley 2.756, en lo referente a los alcances de un fallo judicial de las características como el que afecta a Ansoleaga.

La postura dominante fue la de solicitar a la magistrada un informe que permita ampliar el conocimiento de la medida judicial, a pesar de que el Concejo cuenta con una copia de la resolución en cuestión.

El otro criterio, tal vez el más contundente fue el del edil radical Alfredo Secondo, quien aseguró que de acuerdo a su análisis de la ley "el intendente Ansoleaga ha cesado en su mandato", y que "el presiente del Concejo debe hacerse cargo de la Intendencia".

Si bien la posición de Secondo abrió un debate aún no cerrado, la mayoría de sus pares se inclinó por el criterio de esperar la respuesta de la jueza Abraham sobre el requerimiento acerca de "la situación de insolvencia del intendente".

La prolongada jornada en el Concejo sumó al debate un condimento más a la asombrada realidad política de Granadero Baigorria cuando los concejales solicitaron que Ansoleaga brindara personalmente explicaciones más detalladas en torno del caso que lo involucra. De esta manera y en pleno mediodía, el intendente ingresó a la sede del Concejo acompañado de uno de sus abogados.

Más allá de las afirmaciones mediante las cuales Ansoleaga aseguraba que "para el próximo lunes la situación puede estar solucionada", el encuentro fue subiendo de tono cuando algunos de los concejales propusieron que el mandatario "tome una licencia hasta que la situación en la que se ve envuelto quede debidamente solucionada". La sugerencia no fue aceptada por el titular del Ejecutivo negándose rotundamente a seguir el camino indicado.


Viejas cuestiones
Esa actitud desencadenó una reacción que se apoderó de todo el recinto y fue el momento en que aparecieron las viejas cuestiones políticas pendientes, por lo que el tema convocante quedó abruptamente en un segundo plano y se dio paso a las referencias de temas como la herencia recibida, los gastos de los concejales, la bomba contra la casa de Secondo, y hasta la irónica referencia de un ballet femenino.

Al ser consultado por La Capital el presidente del Concejo, Daniel Lioi, aseguró que en su opinión "en todo momento quedó demostrado que los concejales no quisimos aprovechar esta situación para complicar más la cosa" y que "nos hemos declarado en sesión permanente hasta que la Justicia nos informe el estado de situación. Además hoy (por ayer) invitamos al intendente y nos manifestó que si bien aún no pudo levantar la quiebra esa situación puede estar superada para el lunes".

Sobre el planteo del concejal Secondo de que Ansoleaga había cesado automáticamente en sus funciones y que por esa razón debía asumir el cargo el presidente del Concejo, aclaró que "no podemos tomar una determinación así sin tener un informe preciso de la situación judicial. Eso lo vamos a ver después"

El fallo de quiebra se originó por un accidente de tránsito en 1986 por el cual el abogado de una empresa aseguradora que en noviembre de 2003 le reclamó el pago de honorarios por un valor de 13.000 pesos, medida que la Justicia hizo efectiva a partir del 1º de abril último, calificando la causa como "pequeña quiebra".

Según Ansoleaga, "por el monto de lo reclamado y lo exagerado del procedimiento empleado, se buscó perjudicarme politicamente, porque para cobrarme una deuda por esa cifra no era necesario pedirme la quiebra, porque con trabar un embargo sobre alguno de mis bienes se podría haber resuelto la cuestión".

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El intendente enfrenta una delicada situación.

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