Kirchner y Beliz pulen detalles del Plan de Seguridad Nacional

El proyecto contempla reformas en materia judicial, policial, administrativa, financiera y penitenciaria

El presidente Néstor Kirchner y el ministro de Justicia Gustavo Beliz aprovecharán el fin de semana para darle los últimos retoques al Plan de Seguridad Nacional. El proyecto contempla reformas en materia judicial, policial, administrativa, financiera y penitenciaria.

El presidente podría presentar en su regreso a la Casa Rosada, la semana próxima, el plan elaborado por Beliz. Anteanoche el ministro se reunió en la Quinta de Olivos con el mandatario y el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, para pulir detalles del proyecto.

Beliz lleva años trabajando en este tema, y de hecho presentó versiones anteriores durante las campañas a senador nacional y a jefe de Gobierno porteño. Obviamente, el proyecto fue enriquecido a partir de la gestión en las carteras de Seguridad y Justicia.

Con su designación, Beliz comenzó a enviar al Parlamento una parte de la batería de iniciativas que servirían para la ejecución del plan nacional, aunque siempre buscó un correlato en la provincia de Buenos Aires, epicentro de la crisis de inseguridad.

Ahora, el titular de Justicia parece haber hallado un socio en el nuevo ministro de Seguridad bonaerense, León Arslanian, con quien ya trabajó cuando éste presidía una comisión antisecuestros que funcionaba dentro de la esfera del Ministerio de Justicia.

Precisamente, Beliz propondría la creación de una versión argentina del estadounidense FBI que intervendría en temas como secuestros, tráfico de drogas, venta ilegal de armas y contrabando. La creación de esta versión vernácula del FBI responde, entre otros items, a la sucesión de hechos de corrupción detectada en las policías bonaerense y Federal, un punto al que el plan hará referencia, ya que el gobierno nacional continuará llevando adelante la política de separar de la fuerza a los policías corruptos.

El proyecto contempla un duro combate al tráfico de armas y de drogas, las dos principales industrias ilícitas del mundo, en base a experiencias recogidas por el ministro en Estados Unidos y países de la región.


Un brazo legislativo
El plan tendrá un brazo legislativo, ya que el gobierno prevé continuar con el envío de leyes al Parlamento para ayudar a combatir el delito, como la reglamentación de la venta de celulares, el tráfico ilegal de armas y otras iniciativas. Sobre este punto, el gobierno ya tiene listo el registro de armas decomisadas, con la idea de que no vuelvan al mercado negro.

En sintonía con su par bonaerense, el Ejecutivo nacional pondrá en marcha la construcción de nuevas cárceles y la conversión de edificios del Estado en prisiones, para ir descomprimiendo la presencia de detenidos, especialmente en el conurbano, donde las comisarías están abarrotadas de presos. Además, se unificarán las bases de datos nacionales y provinciales para confeccionar un "mapa del delito", en cada rubro delictivo.

Beliz además impulsa la incorporación del concepto de policía comunitaria, fiscalías barriales y consejos de seguridad barriales, en especial en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires.

El funcionario considera que la presencia de un fiscal en cada punto de la Capital y el conurbano "permitirá que los vecinos puedan realizar denuncias más rápidamente y se establezca un vínculo de mayor confianza con la Justicia". Además, ya comenzó a instrumentar esta iniciativa en la Capital Federal, y tiene gran expectativa en trasladarla al resto del país y en especial al conurbano.

El plan incluirá la iniciativa del policía por cuadra, lo que permitirá que los vecinos conozcan a los efectivos de fuerza de Seguridad que los custodian. Pero este plan también incluirá un mapa que pemitiría un sistema de premios para la policía, de acuerdo a un seguimiento semanal de la tarea realizada por cada comisaría. (Télam)

Aníbal Fernández, Kirchner y Beliz se reunieron.