Termas: el auge del producto

La Secretaría de Turismo de la Nación presentó las directrices de calidad para el producto Termas Argentina, de adhesión voluntaria y desarrolladas por el alto interés demostrado por el sector para profesionalizar la actividad. Abarcan aspectos tales como infraestructura, gerenciamiento, higiene, seguridad y valorización del recurso, entre otros.

“La decisión de diseñar una serie de directrices de gestión para el turismo termal no ha surgido por una cuestión de azar sino porque entendemos que se trata de un sector que viene experimentando un importante crecimiento en su demanda y ha demostrado un alto interés por profesionalizar su actividad y mejorar, día a día, el nivel de todos sus servicios”, destacó el secretario de Turismo, Enrique Meyer.

Pautas de acción bajo la forma de recomendaciones, las directrices son de adhesión voluntaria y pueden ser aplicadas por todas aquellas organizaciones que dispongan de aguas termales, infraestructura e instalaciones de soporte para el desarrollo de la actividad con fines terapéuticos o recreativos, interesadas en la mejora constante de la calidad en la prestación de sus servicios.

Extraídas de la experiencia de los prestadores involucrados y de los avances tecnológicos y científicos, las directrices se adaptan a múltiples realidades, convirtiéndose de esta manera en instrumentos accesibles para todos los actores. Las pautas abarcan aspectos tales como el agua termal, el ambiente y el paisaje, el gerenciamiento de la organización, su personal, el servicio de seguridad, la limpieza y la higiene, la sensibilización de la comunicación al usuario, la infraestructura, el estado de las instalaciones y todos los servicios básicos, así como la valorización del recurso y la participación de toda la comunidad.

En la Argentina, quince provincias ya desarrollan el recurso de termas a través de 36 centros que cuentan con más de 10.000 plazas hoteleras, totalmente equipadas para que el turista se sienta cómodo.

En aumento. El relax en aguas tibias.