Victorias de Duendes y Jockey

Tomás Bondino / La Capital

La definición del torneo Regional del Litoral comenzó a tomar forma. Las Cuatro Hectáreas del Jockey fueron testigo de privilegio de la primera de las tres finales del campeonato. Ayer salieron victoriosos el local y Duendes, que se perfilan como claros aspirantes a la corona. El saldo negativo de la jornada, que sorpresivamente comenzó más tarde de lo preestablecido y que no contó con una marco de público acorde a las circunstancias, se lo llevaron Universitario y Santa Fe Rugby.

Los verdinegros obtuvieron mayor rédito. Vencieron a los santafesinos por un contundente 47 a 5 (5-0), sacaron punto bonus y tuvieron tiempo para reemplazar a medio equipo y evitar algún imprevisto. Por su parte, Jockey se impuso por 17 a 11 (4-1) en un choque que se presentaba como el más peleado del día.

El partido de la tarde fue el que animaron los verdiblancos y los académicos. Fue muy físico, típico choque entre estos dos equipos. Se jugó con intensidad. Trabajaron mucho los forwards y las defensas. Ambos sabían que el más mínimo error costaría caro.

El primer tiempo fue muy bien jugado. Fue cerrado. Ninguno se salió de su repertorio. Se alternaron la posesión de la pelota casi sin cometer penales que pudieran convertirse en puntos esa vía. Al descanso se fue en ventaja el local por 3 a 0.

La segunda mitad fue la antítesis. De arranque Uni consiguió la posesión de la pelota y se lanzó en busca del ingoal rival, pero cometió infracciones que lo dejaron en el camino.

Fue muy parejo. El partido pudo ser para cualquiera. Jockey se terminó quedando con la victoria gracias a que fue efectivo, pegó cuando debió hacerlo.

Duendes no tuvo que renegar tanto. Desde el minuto inicial gestó una victoria inobjetable. Por mérito propio y beneficiado por la expulsión de un rival a los 27 minutos del primer tiempo consiguió arrancar la instancia final con el pie derecho.

Fue una hegemonía. En la etapa inicial el tricolor ni siquiera pudo pisar las 22 del verdinegro.

En la segunda hubo más oposición pero el partido ya estaba liquidado. La ventaja era irremontable con un hombre menos. Entonces Duendes sólo debió seguir atacando en busca del valioso bonus. l