La calle Córdoba se consolida como peatonal de las automotrices

Las ventas récord de autos impulsaron el arribo de las marcas premium a Rosario

Abrieron Porsche y Jaguar y hay otros jugadores que estudian desembarcar

Marcos Cicchirillo / La Capital

Los concesionarios de Rosario proyectaban a comienzos de año que el mercado local estaba cerca del techo en cuanto al posible desembarco de nuevas marcas. Estimaban que no había lugar para las importadoras de vehículos premium. Y estaban convencidos de que si bien la región vive las mieles del campo y en los dos últimos años se registraron récord de ventas, no existía escala para estos jugadores.

Sólo estimaban que había lugar para los económicos autos chinos en el mediano plazo.

Seis meses después la realidad demostró lo contrario: abrió primero Jaguar y la semana pasada Porsche y se rumorea en el sector que otras marcas premium están analizando también utilizar a Rosario como cabecera de playa en el interior para satisfacer una demanda creciente de este tipo de vehículos, que comenzó a madurar a partir del aterrizaje de la mayoría de estos jugadores en el país una década atrás, pero que hasta ahora sólo atendía en Buenos Aires.

“Una distancia que muchas veces frenaba las intenciones de compra de potenciales compradores, que a diferencia de lo que se podría presuponer actualmente un empresario se anima a salir más a la calle con un modelo premium que en los 90”, señaló el titular de varias concesionarias locales, quien relativizó el tema del valor para acceder uno de esos vehículos es similar a la de un camión o una máquina para su fábrica. “Muchos de los que compran en los últimos años fueron actualizando su flota, cambiaron la maquinaria para el campo o ampliaron la fábrica y ahora ven que se pueden dar un gusto que no les resulta oneroso”, agregó.

La apertura de estas concesionarios también derrumbó otra máxima de los últimos años en el sector, que las marcas preferían llegar de la mano de los jugadores que sobrevivieron a las crisis económicas antes que apostar por inversores que no participaban del negocio.

El empresario Hugo Pulenta, importador de Porsche Argentina, explicó que la decisión para elegir a Juan Carlos “Caco” Rossetti respondió a un argumento pasional: “Es un fanático de Porsche que va entender a los usuarios de esta marca”, un factor que consideró clave en el segmento de vehículos deportivos exclusivos.

Rossetti explicó que se quedó con el negocio después de varias conversaciones que comenzaron 3 años atrás cuando compró su primer deportivo de la marca y empezó a insistirle a Pulenta que viniera a Rosario porque estaba convencido de que había mercado. Tenía razón: vendió 6 vehículos en la inauguración del local.

“La compañía había comenzado a estudiar su expansión en el interior del país hace tres años”, reconoció el máximo responsable de Porsche para América Latina, Carlos Martínez, quien aseguró que Rosario es la primera de una serie de aperturas de nuevos locales que continuará en el 2008 con Córdoba, Mendoza y Salta.

La decisión de Porsche de ubicarse en Córdoba y Valparaíso refuerza otro fenómeno: el acercamiento de la vidriera de vehículos hacia los barrios privados y desarrollos inmobiliarios que se fueron ubicando desde Fisherton a Roldán. Hoy calle Córdoba a partir de Ovidio Lagos hacia el oeste se transformó en la peatonal para las automotrices, e inclusive en los próximos días esto se verá acrecentado con la apertura de los nuevos show room de General Motors y Volkswagen. Una pasarela que está más avanzada respecto de la que busca crecer hacia la zona norte, también de la mano del negocio inmobiliario.



La expansión

Si bien la aparición de estas marcas muestra el dinamismo del mercado de la región, las marcas más masivas también se están moviendo para recuperar la cercanía consumidores del interior, en este caso de la provincia, abriendo show room y espacios de servicios en poblaciones en el corto y mediano plazo, que en este caso sí la mayoría de las automotrices reconocen que pretenden ir de la mano sus principales concesionarios en Santa Fe.

Los empresarios locales admiten que hoy el principal “techo” en las ventas está en la capacidad de las automotrices para entregar los vehículos, que a partir de este año comenzaron a extenderse con el aumento de la demanda.

A diferencia de los 90, las marcas premium expanden su red de concesionarios por el interior del país.