La UTA reclama intervenir el peaje

Silvia Carafa / La Capital

La Unión Tranviarios Automotor (UTA) reclamó ayer la intervención del peaje debido a la “negligencia absoluta” demostrada en el accidente múltiple que se registró el jueves en la autopista Rosario-Buenos Aires y que provocó la muerte de cuatro personas y decenas de heridos. Para el referente local del gremio, Manuel Cornejo, al análisis de los siniestros hay que agregar la imprudencia con la que conducen algunos automovilistas. “Manejan como loquitos”, dijo.

   Según el portavoz de la UTA a nivel nacional, Mario Caligari, desde las cabinas hay que informar a los automovilistas sobre el estado de las rutas, de lo contrario “la gente se seguirá muriendo”

   Ayer, mientras se profundizaba la polémica por el humo y la niebla como causas del choque en el que intervinieron tres ómnibus junto a decenas de vehículos, el titular nacional del sindicato, Roberto Fernández, le reclamó al ministro de Planificación, Julio De Vido, que tome cartas en el asunto para que no sigan los siniestros. “El accidente se habría evitado si desde el peaje hubiesen advertido que no había visibilidad por la niebla”, insistió Caligari.

   Para los gremialistas, en la UTA hay “malestar y preocupación” por los accidentes que se producen en las rutas de todo el país debido a la falta de visibilidad producto de la niebla.

   “Hay que ser sinceros, hay que decirlo, hay mucha imprudencia y eso lo puede comprobar cualquiera”, argumentó Cornejo. Además, señaló que “cuando hay accidentes graves se habla por unos días y después todo vuelve a quedar como antes”. Y agregó que ya son varias las ocasiones en las que el gremio alzó la voz para reclamar por las condiciones en que se transita por autopistas y rutas.

   “Los automovilistas no conducen con prudencia”, señaló Cornejo y dijo que no pocas veces, en plena niebla vio cómo varios vehículos sobrepasaban el suyo en una verdadera “jugada de ruleta rusa” ya que no se veía lo que había adelante. “En las rutas son todos corredores”, aseguró.



Algo habrá que hacer. Todavía consternados por la muerte de Jorge Canelli, el conductor del ómnibus Chevallier que murió el jueves en el choque múltiple, sus compañeros de trabajo recibieron otra noticia que los devastó: ayer también falleció el segundo chofer herido, Jorge Quiroga. En los últimos seis años, fueron 20 los conductores que perdieron la vida en los caminos.

   “Sí. Algo vamos a hacer”, explicaron Marcelo Estévez y Oscar Strua, delegados de los choferes de la empresa Chevallier. Ambos se referían a expresar su dolor y su impotencia a través de un acto público como el que realizaron el jueves a la noche cortando una de las manos de la autopista, a la vista de Vial 3, concesionaria del lugar a la que le hicieron sentir su repudio. “Está en pésimas condiciones y no tienen elementos”, comentaron. El corte se realizó en la noche del jueves, desde las 22 y hasta las 2, en la mano que va de Buenos Aires a Rosario.

   Según Strua, en Chevallier no hay exigencia de horario frente a motivos como la niebla o la lluvia, más aún, en muchas ocasiones los conductores detienen la marcha en estaciones de servicio hasta que pase el chubasco. También dijo que no pueden excederse en velocidad porque el tacógrafo marca los 90 kilómetros reglamentarios y pasarlos es exponerse a cargar con toda la responsabilidad si se presenta algún inconveniente. Pueden perder el registro o el trabajo por la infracción.