Uruguay

Pueblos de pescadores y naufragios

Punta del Diablo es un pueblito que historicamente se caracterizó por dedicarse a la pesca del tiburón. Esta apacible aldea se encuentra ubicada en una zona rocosa que continuamente esculpen las olas del mar. Allí se pueden obtener fotos muy interesantes, comprar regalos en los numerosos puestos de artesanías, salir a comer los frescos y deliciosos mariscos, pescados como pejerrey y sargo o probar los típicos buñuelos de algas.

Una de las características de la villa es la tranquilidad que ofrece al visitante, la cordialidad de su gente, el verde-azul de sus aguas, y el firmamento estrellado con su inmensa luna. Allí, además de disfrutar de las playas, se pueden alquilar carros tirados por caballos para pasear por las playas y llegar hasta el Cerro de la Viuda, donde hay curiosas formaciones rocosas.

Otro de los edenes uruguayos es Aguas Dulces, balneario de pequeños ranchos, casas y cabañas ubicadas sobre la playa de finas arenas que se extiende hasta donde se pierde la vista. Aquellos que gustan de caminar siguiendo la orilla del mar encontrarán restos de los innumerables naufragios ocurridos en esta zona. Está ubicado a la altura del kilómetro 260 de la ruta 10 y a sólo 9 Kilómetros de la ciudad de Castillos.

Frente a la punta y al faro de Cabo Polonio, varias formaciones rocosas son el hogar de los lobos marinos, cuyos lamentos pueden oírse entre el estruendo del mar contra las rocas. Los lobos son los habitantes naturales de este lugar, donde es posible encontrarlos tomando sol en alguna roca o luchando contra las corrientes.

A Cabo Polonio se puede acceder caminando unos siete kilómetros aproximadamente desde Valizas, o contratando los servicios de vehículos todo terreno que se encuentran en la ruta 10, cercanos a la entrada oficial a Polonio en el kilómetro 264. Otra manera de llegar es contratando los servicios de carros tirados por caballos que también se encuentran a la altura del kilómetro 264.

Aguas Dulces
Otros balnearios recomendables para visitar es el de Aguas Dulces, que nació rodeado de pequeñas lagunas y esteros que aún hoy subsisten, algunas de ellas son la de Las Lisas, Próxima al Gaindford, la de Clotilde Brioso (dentro de la forestal), la de los ahogados (leyenda popular) hoy laguna de los García.

En el entorno de medanos, agua y esteros, Aguas Dulces fue creciendo sin ningún plan de urbanización y fue necesario de que hubiera una escuela. En 1967 se inauguró la capilla de Aguas Dulces y el balneario fue creciendo, y centenares de viviendas de distintos materiales y diferentes formas emergieron entre medanos, acacias, pinos, caminitos y su avenida principal.

La costa Atlántica esta marcada como uno de los doce cementerios dde barcos en el mundo y Aguas Dulces no está ajena a estos tristes acontecimientos, y numerosas embarcaciones de diversas nacionalidades se hundieron frente a sus costas. En esta zona aún se aprecian restos de algunos de los barcos, como el bergantín holandés Junior (29 de junio de 1869), el L´Arinos (9 de octubre de 1875), el vapor inglés Gaindford (11 de septiembre de 1884), y el Johamann o Juanita (18 de marzo de 1891), entre otras embarcaciones.