Viajeros del tiempo

Maldita monogamia.

El conocido escritor francés Max O'Rell, quien ha viajado por toda América, Europa, y parte de Asia y Africa, sostiene en el New York Journal que en Budapest y en Irlanda ha encontrado las mujeres más hermosas del mundo, con rostros de Madonna y cuerpos de estatuas griegas. "Si las leyes no prohibiesen la poligamia -dice- me haría amar por una inglesa o por una hermosa hija de Virginia. Mi casa estaría cuidada por una alemana, hablaría de arte con una francesa y disfrutaría de los placeres intelectuales con una americana. Y cuando el sopor de la vida entorpeciese mi organismo, llamaría a una española para que su presencia precipitase a torrentes la sangre de mis venas". De lo transcripto se ve que al escritor francés le gustan todas, tanto rubias como morenas, lo mismo que a muchos que no son franceses ni escritores.


La huelga de mozos y cocineros.
Ha continuado sin solución en el día de ayer la huelga de mozos y cocineros, pues todas las gestiones hechas para llegar a un acuerdo han fracasado. Por falta de estos empleados, algunos restaurantes han debido cerrar sus puertas, y los viajeros que llegan se han encontrado con que no había nadie que los atendiese. Temiendo que el conflicto se siga prolongando en el tiempo, varios patrones de cafés, confiterías y hoteles procuran traer gente de servicio de la Capital Federal y del interior, pero a juzgar por la buena voluntad entre las partes beligerantes no dudamos de que se llegará a un pronto arreglo.


Humorada de la high.
Tres señoritas de la alta sociedad neoyorquina tuvieron el otro día la humorada de dirigir una locomotora entre Arkansas y Oklahoma, en un trayecto de 300 millas. Las improvisadas maquinistas salieron con bien de su empeño, haciendo marchar el tren a 65 millas por hora. Esta proeza es muy elogiada por la prensa norteamericana.
La moral y los focos de corrupción.
Desde tiempo atrás existen en Alberdi varios garitos donde se despluma a los incautos, los que a la vez sirven de punto de reunión de vagos que bastante perjuicio han causado a dicho pueblo. Pero ahora, por resolución del subcomisario Tassada, se han prohibido esos focos de corrupción, con aplauso del vecindario y de los padres de familia, pues allí se admitían menores sin escrúpulo ninguno. Los dueños de los garitos piensan mover influencias para que se les permita seguir, pero es de esperar que triunfe la moral.

Investigación y realización Guillermo Zinni ©

Fuente: La Capital