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 sábado, 28 de octubre de 2006  
Premiaron el "Genio" de Camila
Inventó un desinfectante y ganó en el Concurso Nacional de Innovadores, pero volvió a Rosario con las manos vacías

Camila Giordano llevó su casi mágico producto de limpieza hasta Buenos Aires y ganó en el rubro "productos innovadores". Estuvo ayer entre las diez premiadas en el Centro Cultural Borges de la Capital Federal. "Genio" se lee en la botella que contiene una dosis de su creación. Así bautizó ella misma al líquido viscoso que supo crear y producir luego de tres años de trabajo. Genial resultó la creación de esta rosarina de 16 años, alumna del Colegio Nuestra Señora de Los Angeles (Tucumán y España), vecina del centro de la ciudad, amante, como su padre -químico de profesión- de las "ciencias duras", e hincha de Rosario Central.

Camila y su invento calificaron para participar en el 2º Concurso Nacional de Innovadores 2006 organizado por el Instituto Nacional de Educación Técnica, un organismo del Ministerio de Educación de la Nación. Al concurso llegaron un centenar de participantes de todo el país, luego de una precalificación donde lo intentaron más de 1.500 proyectos.

El producto de limpieza que inventó Camila, "Genio desinfectante", no es tóxico ni corrosivo, forma una película residual antibacterias, no se chorrea en las superficies verticales -es viscoso-, y por si fuera poco, tiene un costo competitivo en el mercado: un litro por 1,85 peso. Para llegar al "Genio", Camila contó con el impulso familiar y la ayuda del investigador del Conicet y biotecnólogo Leonardo Pérez.

"Este trabajo lo fui haciendo fuera de horarios, en las vacaciones. Para mí fue un hobby", comentó ayer la pequeña Camila a La Capital. Feliz con el reconocimiento, Camila ya está pensando en lo que viene: patentar el producto y organizar la producción a gran escala. La inventora rosarina ya tiene todo calculado: se necesitan unos 10 mil pesos para montar la fábrica.

En este aspecto, el premio obtenido por Camila no tuvo correlato económico. Si bien las premiaciones incluyeron un monto total de 180 mil pesos, computadoras personales y equipos MP3, la escuela rosarina no obtuvo ningún beneficio material. ¿La razón? Fue la única institución educativa no técnica que llegó a calificar en el Concurso de Innovadores. Un criterio que abrió la polémica.

R.M.
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