Otra vez preso y vinculado con un homicidio

El año pasado estuvo preso un tiempo porque se sospechaba que había tenido participación en uno de los crímenes de la calle José C. Paz, en la zona norte de la ciudad, donde en 15 meses asesinaron a tres ancianas para robarles. El tiempo pasó y recibió falta de mérito. Ayer lo volvieron a detener porque la mujer de un hombre asesinado el martes lo reconoció como una de las dos personas que ese día llegaron a su casa y le pusieron un par de certeros disparos a Roberto Insaurralde.

Víctor A., de 22 años, fue detenido en su casa del Remanso Valerio, en Granadero Baigorria, con una orden de arresto firmada por el juez de Instrucción Jorge Eldo Juárez.

El crimen de Insaurralde ocurrió el martes a las 15.50 en la villa ubicada a la vera de la vía del ex ferrocarril Belgrano, a la altura de Pellegrini al 4700. Insaurralde estaba en la puerta de su casa cuando llegaron dos hombres que "no eran del barrio" y directamente lo acribillaron. Fueron cinco los disparos que se escucharon, pero dos dieron en el cuerpo de la víctima.

Según se supo ese día, el hombre asesinado tenía numerosos antecedentes penales e incluso cumplió una condena en la cárcel de Coronda. Por eso, los investigadores estaban convencidos de que todo se trató de un ajuste de cuentas o una venganza. Lo cierto es que la primera pista la dio la mujer de Insaurralde, quien reconoció en un álbum fotográfico de la policía a uno de los hombres que asesinó a su concubino.

Ese hombre, según fuentes de la investigación, es Víctor A., de 22 años, un viejo conocido de los inspectores de Homicidios porque a mediados del año pasado fue investigado por uno de los crímenes de mujeres ocurridos en la calle José C. Paz. Una vez que fue señalado por la testigo, ubicar a Víctor no fue tan difícil. El sospechoso estaba en su vivienda de siempre, en el barrio Remanso Valerio de Granadero Baigorria.

Justamente en ese lugar la policía lo había arrestado en junio de 2005 en medio de la investigación del crimen de Teresa Bressán de Collado, una mujer de 87 años que apareció estrangulada el 9 de junio, en José C. Paz al 1400.

Las investigaciones que derivaron en ese primer arresto de Víctor A. se habían iniciado con otro crimen ocurrido en el mismo barrio, el de Nelly Viola, de 72 años. La mujer vivía en José C. Paz 2465 y murió por un golpe en la cabeza. Según se pudo comprobar en ese momento, el o los autores del crimen se habían llevado un televisor y electrodomésticos. La pesquisa derivó en un allanamiento en la casa de Víctor A. en el barrio de pescadores junto al Paraná.

En su momento el sospechoso admitió saber que unos amigos suyos, un travesti llamado Pablo Sánchez y su fiolo, Manuel Belisán, le habían contado que robaron y golpearon a una mujer en calle José C. Paz. Pero, de acuerdo a lo que pudo probar después, esa mujer no era Nelly Viola, sino Teresa Bressán. De esa forma, los tres quedaron detenidos por ese hecho. Meses después, la jueza de Instrucción Mónica Lamperti dictó falta de mérito a Víctor A. y procesó a Belisán y Sánchez por homicidio.