EL PARTIDO

Pekerman mostró las cartas pensando en el debut mundialista

Mauricio Tallone / La Capital (Enviado especial)

La fiesta de despedida obró de trampolín. José Pekerman aprovechó la ocasión para aplicar una suerte de carbónico del equipo que tiene en mente para el debut mundialista ante Costa de Marfil. Es cierto, fue apenas un esbozo dentro de un partido que nunca tomó la estatura de tal porque fue un entrenamiento a estadio lleno contra un Sub 20 remendado. Igual la precariedad de la cita no invalidó observar a la formación que más posibilidades tiene de iniciar el camino en Alemania.

Si alguien tenía alguna duda de cómo se pararía la selección en la zona defensiva, anoche quedó en evidencia que la mención nominal es con cuatro en el fondo (como dijo el técnico), aunque a la hora de articular movimientos, está claro que funciona con tres. Porque Ayala y Heinze se prestaron la función de último hombre, mientras que Burdisso y el defensor de Manchester United fueron los encargados de cubrir las bandas cuando el equipo se volcó en posición ofensiva. El ropaje de Sorín no fue el de un lateral clásico. Juampi se sumó permanentemente al ataque y dejó en claro que está más para volantear que para hacer los relevos en esa zona.

El mediocampo titular jugó apenas 25 minutos. De no mediar nada extraño, Maxi Rodríguez, Mascherano, Cambiasso y Riquelme son fijas en el Mundial. La muestra fue anoche, donde el ex Newell's le puso marca a su recorrido por derecha, incluso tras un centro suyo casi llegó la apertura de Cruz y Heinze en la misma jugada. Entre Mascherano y Cambiasso se repartieron la porción del centro del terreno, con el Cuchu más recostado por izquierda y con Sorín como permanente rueda de auxilio. Román se ubicó bien suelto, digitó las maniobras en ofensiva y cuando pudo se juntó con Tevez.

Precisamente un toqueteo entre ambos derivó en una gran jugada de Carlitos, cuyo remate terminó pegando en el palo izquierdo de Leo Franco (atajó para sumar minutos de fútbol). La presencia del Apache dejó de manifiesto que por ahora le gana la pulseada a Saviola, quien había arrancado como titular en la práctica de fútbol del martes a la tarde.

El otro atacante de la noche fue Cruz, pero el Jardinero se dio el gusto de jugar desde el arranque porque Crespo amaneció con un problema intestinal y no jugó ni un minuto, al igual que Cufré.

El segundo tiempo de 25 minutos se desnaturalizó con los cambios que introdujeron tanto Pekerman como la dupla Tojo-Fillol. Una muestra acabada de que se trató de un partido sin exigencias y que además contó con la buena predisposición de Elizondo, el árbitro mundialista.

Pero paradójicamente los goles de la selección estaban en el banco. Palacio, en tres oportunidades, y Saviola le entregaron a José una señal de humo con sus conquistas. El otro que dijo "acá estoy" fue Lionel Messi, quien ingresó por Mascherano y participó del tercer gol en una combinación con Palacio.

El resto de los ingresados fueron cambios de figurita. Una reserva que tiene Pekerman por si la formación estelar no da sus frutos. José no mintió. Es cierto que tiene definido a los once. Por eso cuando hoy apoye la cabeza en el avión dormirá tranquilo.

Rodrigo Palacio elude a Franco y define. El delantero xeneize marcó tres goles en la despedida de la selección.