Susan Sarandon, Juliete Binoche y Tim Robbins animaron la gala de apertura

Un homenaje merecido al cine nacional

Tristán Bauer, Luis Puenzo y Ricardo Darín fueron objeto de tributos por su aporte al séptimo arte de la Argentina

Rodolfo Bella / La Capital

Informal y emotiva. Así fue la fiesta de apertura del 21º Festival Internacional de Cine de Mar del Plata en la cual se reivindicó a la actividad como una herramienta de testimonio y resistencia social. La gala, que se realizó en el teatro Auditorium, tuvo como invitados especiales a tres de las figuras más destacadas de la actividad a nivel internacional: Susan Sarandon, Tim Robins y Juliette Binoche. Los anfitriones fueron Cecilia Roth y Adrián Suar. Al finalizar, se exhibió el primer filme en competencia, "La salvaje y azul lejanía", de Werner Herzog.

Los encargados de abrir el fuego del festival fueron Jorge Alvarez, presidente del Incaa, y Miguel Pereyra, presidente del festival. Pereyra, sobrio y con buen humor, tal como fue el clima general de la noche, comenzó diciendo que este es su segundo año de traje y corbata en ese rol, lo cual significa que "el festival crece". También explicó por qué estaban invitados dos actores estadounidenses cuando su intención es darle al encuentro un perfil latinoamericano: "Porque ellos demostraron tener un compromiso ideológico" ligado a la libertad y a la paz.

La serie de homenajes comenzó con el que se le rindió a Tristán Bauer, director de "Iluminados por el fuego", el filme sobre los soldados que lucharon en la guerra de Malvinas. "Se puede hacer un mundo por la paz y luchar contra la guerra desde el cine", dijo Bauer. El concepto fue uno de los primeros que apeló a otra de las constantes de la fiesta como fue la utilidad del cine al servicio de las ideas solidarias.

Así lo dijo también el director Luis Puenzo, cuando recibió el homenaje por el aniversario de los veinte años del Oscar que recibió "La historia oficial". Lo acompañaron en escena algunos de los intérpretes, entre los que estuvieron Chunchuna Villafañe y Patricio Contreras. Héctor Alterio estuvo presente a través de un video que envió desde España.

Mercedes Morán fue la encargada de presentar a Tim Robbins. El actor recibió con buen humor su regalo de gentileza. Se trataba de un mate con el cual jugó a que no sabía cómo usarlo. "Argentina es un ejemplo de lucha y de perseverancia", aseguró el ganador del Oscar por "Río místico", y añadió:" Vimos sus luchas en sus películas y documentales y eso es lo importante de la cinematografía: que puede contar las vidas de todos nosotros".

Graciela Borges presentó a la esposa del actor, la actriz Susan Sarandon. Su discurso tuvo un tono confesional. "En Estados Unidos, somos ignorantes de muchas cosas que pasan en el resto del mundo, e inclusive de las que pasan en nuestro país", comentó la actriz, y añadió: "La violencia y el dolor de la gente ante las injusticias puede ser terrible, y por eso me siento feliz de ser parte de una comunidad fílmica que se atreve a hablar de esas cosas".

Antes del final también fueron homenajeados el director José Martínez Suárez y el actor Ricardo Darín.

Susan Sarandon y Tim Robins siguieron la ceremonia desde la platea del Auditorium.