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domingo,
05 de
marzo de
2006 |
Pocas pistas para dar con quienes
balearon al barrabrava de Central
Investigan si quienes le dispararon a Pillín Bracamonte iban en un Peugeot 206 color gris
Dos vainas calibre 9 milímetros fueron halladas por la policía frente a la casa donde Andrés Pillín Bracamonte fue herido de cuatro disparos la noche del viernes. Ese hallazgo, y el dato de que los agresores al parecer se movilizaban en un Peugeot 206 gris con la patente terminada en 203, eran las únicas pistas con que ayer contaban los investigadores de la agresión al líder de la barra brava de Rosario Central. Para la policía, la hipótesis más firme es que la balacera estaría relacionada con internas de la hinchada. Mientras tanto, Pillín seguía internado, fuera de peligro y hasta ayer sólo dijo a la policía que lo atacó un desconocido.
Bracamonte fue baleado a las 21.30 del viernes frente a la casa de barrio Sarmiento donde vive con su familia. Fue alcanzado en abdomen, pierna y tobillos por cuatro de los seis o siete disparos que le efectuaron. Ninguna de esas heridas revestía gravedad, por lo cual ayer Pillín dejó el Hospital de Emergencias y fue trasladado al Hospital Español, donde al mediodía lo operaron por la herida sufrida en la pierna.
"Se habló muy poco. El refirió lo que le había pasado pero no hizo especulaciones sobre el hecho ni identificó a los autores", reveló un jefe policial que estuvo con Pillín luego del ataque, a poco de que el barrabrava ingresara al Heca herido de cuatro balazos. "Estaba muy dolorido y sólo dijo que un tipo lo atacó a balazos", añadió. Sin una declaración oficial de Pillín sobre el episodio, la policía no contaba ayer con muchas pistas .
Los agentes de la seccional 10ª contaban sólo con dos elementos: el auto habría sido un Peugeot 206 gris y el arma una pistola 9 milímetros. Esto se supo cuando en la cuadra de Darragueira al 1500 donde atacaron a Bracamonte se encontraron dos proyectiles encamisados de ese calibre.
En cuanto al número de la patente, una fuente refirió que el dato fue aportado por la esposa de Pillín. Pero esa pista tampoco era muy firme. Según un investigador, el barrabrava dijo que estaba de espaldas cuando lo atacó un hombre que iba caminando. "Al parecer ese auto estaba estacionado a la vuelta", dijo el oficial.
No obstante, en el enjambre de especulaciones que se tejen en torno al hecho todas coinciden en el punto del ajuste entre barras. "Creemos que esto fue un aviso. No lo quisieron matar sino decirle acá estamos", dijo una fuente que vinculó el ataque con los incidentes del miércoles pasado en la cancha de Central, cuando la barra salió en defensa de los dirigentes ante un cuestionamiento de la platea.
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Pillín dijo que no conocía al agresor.
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