Obligaciones familiares

Las mujeres disfrutan menos de su tiempo libre que los hombres

Mientras los hombres pueden desenchufarse a través de momentos de relax y esparcimiento propios, las mujeres, en especial las madres que trabajan, suelen aprovechar el ocio para ocuparse de los hijos y de la casa. A esta conclusión llegó un grupo de profesionales de la Universidad de Ohio, en Estados Unidos, quienes se propusieron determinar en qué medida los momentos de ocio sirven para recuperarse tras un día o una semana cargados de estrés y obligaciones.

Para eso analizaron datos obtenidos a través de dos encuestas nacionales que recolectaron datos acerca de las actividades diarias de los participantes. La primera, para la que se realizaron entrevistas con 708 hombres y mujeres, fue realizada entre 1975 y 1976 por profesionales del Instituto de Investigación Social de la Universidad de Michigan, mientras que la segunda, que cotejó las respuestas de 1.151 personas, fue llevada a cabo por el Centro de Encuestas de la Universidad de Maryland, entre los años 1998 y 1999.

La variable "tiempo libre" fue considerada como la cantidad de horas que los participantes no pasaron en su trabajo ni cuidando a sus hijos o encargándose de cuestiones familiares. Asimismo, los encuestados fueron consultados acerca de cuán frecuentemente se sentían cansados o agotados: nunca, a veces o siempre.

Luego de la segunda etapa de la investigación, los profesionales concluyeron que los momentos de relajación, ocio y tiempo libre, son extremadamente útiles y provechosos para los hombres, mientras que las mujeres no pueden disfrutarlos a pleno.

La doctora Stella Maris Diamanti, médica psiquiatra, jefa del Servicio de Psiquiatría del Hospital Español de Buenos Aires, afirmó que si bien es cierto que la mujer cumple determinados mandatos, entre ellos el de ocuparse o pasar más tiempo con sus hijos, "hace algunos años los roles estaban más marcados que ahora, porque actualmente la mujer puede disfrutar un poco más de momentos de ocio propios, como ir a jugar al tenis con amigas, entre otros".

En cuanto a la postergación de los momentos propios dedicados a los hijos, la especialista estableció una distinción. "Yo no pondría la situación de las mujeres en términos de renuncia, ya que creo que cuando una mujer le dedica tiempo a los hijos, está eligiendo estar con ellos. Ahora, si hablamos de la generalidad, fuera de los momentos de ocio, las mujeres renuncian a muchas cosas por sus hijos, entre las que se encuentran las horas de sueño y la belleza del cuerpo".


Diferencias de sexo
La raíz de la diferencia radica, según los investigadores, en que los hombres suelen desligarse de sus responsabilidades, despejar la mente y lograr cambios sustanciales en su estado de ánimo y humor en su tiempo libre. Las mujeres, en cambio, suelen seguir pensando, inclusive en sus momentos de esparcimiento, en todas las obligaciones que tienen.

Entre ellas, las más comprometidas son aquellas que tienen hijos y además deben cumplir con rutinas laborales muy exigentes. Según los investigadores, esto significa que la calidad del tiempo libre para hombres y mujeres es distinta.

De acuerdo con las conclusiones generales del ensayo que forman parte de una edición reciente de la publicación Journal of Marriage and Family, incluso durante su tiempo libre, las mujeres suelen estar más atentas a las necesidades y requerimientos de sus hijos que los hombres.

Esto tiene que ver con que el significado del ocio y el tiempo libre en sí es diferente para ambos sexos, en especial cuando las mujeres son madres, ya que la posibilidad de descansar de sus actividades laborales está directamente relacionada con pasar más tiempo con los chicos, mientras que para los hombres suele ser sinónimo de amigos y actividades deportivas y recreativas.

"No estamos afirmando que las mujeres no disfrutan su tiempo libre en compañía de sus hijos, pero es diferente si ese mismo tiempo de ocio se disfruta con amigos. Para aliviar tensiones, las mujeres necesitan más tiempo libre y en lo posible que no esté combinado con otras actividades o responsabilidades como cuidar a los niños. En base a esto, parece que ellas debieran cumplir un mandato familiar", señaló la doctora Liana Sayer, profesora de sociología de la Universidad de Ohio y coautora del estudio.

Los investigadores concluyeron que mientras los hombres que tienen más tiempo libre disfrutan de una mejor calidad de vida que sus pares cuyas ocupaciones son más arduas, las mujeres en general no logran conciliar sus momentos de esparcimiento con la delegación de las tareas del hogar, por lo que suelen quedar condicionadas a las necesidades de los otros.

En este sentido, la doctora Sayer destacó que mientras los hombres casados con hijos no sienten más presión que los solteros, "las mujeres casadas y madres, son dos veces más propensas a sentirse siempre estresadas o atareadas que aquellas que no tienen obligaciones familiares".