En Foco. El mercado laboral se recompone

Después de casi una década donde hablar de empleo en Rosario significaba repasar duras estadísticas que daban cuenta de una no menos terrible realidad, marcada por los altos índices de desocupación, en el último año el escenario viró.

En la semana que pasó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) difundió los datos del último trimestre del año pasado a nivel país que mostraban una caída del desempleo de dos puntos y lo ubicaban muy cerca del dígito: 10,1%. Renglón seguido, los analistas comenzaron a esbozar el escenario que se viene para la región y todas fueron buenas noticias. Analizando la performance que vienen registrando las tasas de empleo en el Gran Rosario, todo indica que la desocupación retrocederá en la zona aún más que en la media del país.

También la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) que elabora el Ministerio de Trabajo de la Nación ratificó la tendencia. Los números de enero de este año precisan que en Rosario el empleo privado registrado creció 0,7% entre el primer mes de 2006 y diciembre pasado, el indicador más alto de los principales aglomerados relevados, con la industria manufacturera y la construcción como motores.

Pero al ritmo que se recupera el empleo también cambia en la región hasta el propio imaginario colectivo que había sembrado la desocupación por encima del 20%, el cual hacia que se volviera irrisorio pensar en la movilidad laboral por elección. Tener un trabajo era un bien tan preciado que muy pocos se animaban a cambiarlo por otro por la sencilla razón de que la demanda laboral era escasísima.

En estos días eso también se transformó. "Comienza a registrarse movilidad por salario", expresaron desde las propias empresas de contratación de personal. Por eso, hoy los habitantes de estas tierras se animan a renunciar para conseguir mejores ingresos, un fenómeno que se agudiza a medida que crece la calificación laboral, pero que tampoco es ajena a estratos medios con alta especialización como técnicos y obreros con oficios.

Más y mejor trabajo, como gusta reafirmar a través de esloganes a la cartera laboral. Quizás a Rosario le llegó la hora.