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domingo,
02 de
octubre de
2005 |
Tangokinesis presentará su obra "Cotillón"
Fusión de tango, folclore y clásico
para celebrar doce años en escena
La coreógrafa Ana María Stekelman mostrará su última creación en El Círculo
La compañía Tangokinesis presentará una función de su obra "Cotillón", el martes próximo, a las 21, en el teatro El Círculo, Laprida y Mendoza. La propuesta, que forma parte de la décima función de abono de la sala, incluye músicas de géneros tan diversos como el tango, el folclore y la música clásica, y fusiona en la puesta en escena la danza contemporánea con el tango, un estilo en el que la directora Ana María Stekelman es una de las pioneras.
El nombre de la obra está ligado a los motivos que le dieron origen, ya que se trata de un show que Stekelman creó para celebrar los doce años de trayectoria independientes del grupo Tangokinesis, y que fue estrenado en agosto pasado en el teatro Maipo, de Buenos Aires.
Según se adelanta el show se desarrolla en tres bloques. El primero está compuesto por una suite del compositor Raúl Garello, interpretada por el sexteto que el músico dirige. La suite incluye los temas "Pantomima", "Redención" y "Margarita de agosto", de Garello, a las que se suman "Negracha", de Osvaldo Pugliese; "Canaro en París", de José y Alejandro Scarpino y Juan Caldarella, y "La Trapera", de Aníbal Troilo.
El siguiente tramo, "Cotillón", consiste en un homenaje a famosos pas de deux de ballets clásicos como "Corsario", "Coppelia" y "Quijote". Este trabajo se desarrolla en torno a una investigación que realizó el grupo sobre el movimiento y el uso de objetos en escena.
Según explicó la directora, ese homenaje encontró sus razones en la admiración que siente por el género. "Los grandes pas de deux siempre me impresionaron y brindaron gran emoción y alegría. Este trabajo es mi homenaje a los creadores y bailarines de todos los tiempos que han sido capaces de transportarnos hacia el lugar de lo maravilloso".
En el último tramo, la compañía interpreta una coreografía sobre "Bolero", la pieza de Maurice Ravel. La directora y coreógrafa explicó que en esta ocasión la idea rectora fueron las obsesiones: "Al acercarme a esta obra me di cuenta que trata sobre la obsesión y la posibilidad de repetir algo pero, a su vez, de cambiarlo siempre", en una coreografía que fusiona dosis la danza contemporánea, tango y ritmos folclóricos.
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La compañía festeja con coreografías que son un homenaje a diversos géneros.
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