Huida trágica. Destinarán 3 millones de euros para mejorar las fronteras de Ceuta y Melilla

Marruecos aborta el ingreso de 50 inmigrantes a territorio español

Madrid aumentó a 640 el número de militares que supervisará la seguridad de sus enclaves en Africa

Madrid. - Otros cincuenta inmigrantes africanos intentaron infiltrarse ayer en el enclave español de Melilla, en el noreste de Marruecos, pero fueron detenidos por la policía de ese país. No obstante, la situación era de "calma y normalidad" dentro de Melilla, del lado español, un día después de registrarse una avalancha de más de 500 inmigrantes subsaharianos en la frontera ceuta.

En el operativo, a cargo de las fuerzas policiales marroquíes, no intervinieron las tropas españolas enviadas el jueves a la región luego de que cinco inmigrantes murieran baleados (dos en territorio español y tres el marroquí) en un intento masivo de irrupción en Ceuta, el otro enclave norafricano español. No obstante, el gobierno español decidió ayer elevar a 640 el número de militares que, durante un tiempo indeterminado, vigilarán las vallas fronterizas que separan Ceuta y Melilla de Marruecos. Ceuta y Melilla, enclaves de España desde hace varios siglos, son las únicas fronteras de Europa con el continente africano.


Plan de seguridad
Según el plan de seguridad adoptado ayer por el Consejo de Ministros español, las fronteras de Ceuta y Melilla serán dotadas con "más elementos estructurales que impidan el acceso directo al vallado, así como dispositivos técnicos de detención y vigilancia". Además, parte de los 3 millones de euros destinados para este plan serán utilizados para reforzar los servicios de atención humanitaria en los centros que reciben a los inmigrantes en ambas ciudades.

Los principales diarios españoles aseguran que el último intento de infiltración en territorio español fue "frustrado" por la policía marroquí, que detuvo a cincuenta inmigrantes antes de que pudieran colocar sus escaleras rudimentarias sobre la primera valla de alambre de entre 3 y 6 metros que separa a Melilla de Marruecos.

"La noche transcurrió tranquila. No se produjo ninguna entrada de inmigrantes a Melilla", señaló un vocero del gobierno autónomo, que dijo no poder confirmar que se hayan registrado detenciones en territorio marroquí durante la madrugada. Afirmó que "la situación es de absoluta normalidad, actualmente 120 efectivos militares controlan por turnos la frontera sin que se hayan registrados incidentes".

Además, las fuerzas policiales marroquíes detuvieron ayer a 60 personas durante redadas entre los inmigrantes que acampan escondidos en los bosques próximos a la valla fronteriza de Ceuta, listos para intentar cruzarla.

En los últimos tres días, grupos de entre 500 y 600 africanos, en su mayoría procedentes de países subsaharianos, se lanzaron con escaleras rudimentarias y por distintos lugares de forma coordinada sobre la doble valla de alambres con púas que rodea tanto el enclave español de Ceuta como el de Melilla.

La tensión se elevó al máximo el jueves cuando cinco inmigrantes murieron baleados y cientos resultaron heridos en un intento masivo de infiltración en Ceuta. Las víctimas fueron tiroteadas, según las autopsias, pero resta determinarse si desde España o desde Marruecos.

Los funcionarios españoles y marroquíes no formularon comentarios ayer acerca de si sus respectivas fuerzas de seguridad fueron responsables de matar a los inmigrantes. Medios de comunicación informaron que la trayectoria de las balas sugerían que los disparos procedían de la guardia fronteriza marroquí, mientras que ésta dice que las balas -que al parecer también tienen los muertos en lado marroquí- eran del lado español.

En tanto, apoyados por helicópteros, una barrera humana de soldados marroquíes, ubicados uno cada dos metros, custodia las fronteras de Ceuta y Melilla del lado de Marruecos, mientras los soldados españoles, sin armas de fuego, pero con material antidisturbios, hacen lo suyo del lado de España.

Soldados españoles y la Guardia Civil patrullan el cerco en Melilla.