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 sábado, 01 de octubre de 2005  
Por amor a Dios. María de Lourdes del Santísimo Sacramento desarrolla su labor en la ciudad
Una religiosa del Verbo Encarnado podría ser la primera santa rosarina
La causa, primera en la historia del Arzobispado local, está en su fase diocesana, de testimonios y documentos

Marcelo Castaños / La Capital

Por primera vez en la historia, Rosario tiene una candidata a beata, paso previo a la santificación. La investigación está en manos de un sacerdote rosarino, lo cual la convierte también en la primera causa que se tramita en la ciudad. Se trata de la hoy sierva de Dios María de Lourdes del Santísimo Sacramento, una religiosa del Verbo Encarnado que a pesar de haber vivido en Rosario desde 1936 hasta su muerte, en 1988, trascendió sus fronteras y es querida en varios países de Latinoamérica y Africa, donde la congregación tiene más peso.

La causa está en manos del padre Carlos Costa por orden de la misma congregación, con sede en México, que lo declaró postulador. Y en estos momentos está en la fase diocesana, es decir, de recopilación de documentos y testimonios probatorios.

Según explicó el sacerdote, María de Lourdes, o Lurditas como la llaman cariñosamente en México, se caracterizó por una enorme humildad, obediencia y sencillez, en una extrema pobreza que afrontó "siempre con una sonrisa en los labios. Desde lo oculto de su consagración hizo todo con una disponibilidad muy grande, y también con una gran alegría". El religioso aseguró que la postulante es muy querida en México, Guatemala, Puerto Rico, Kenia y Tanzania, además de la Argentina.

Las novenas compuestas a su nombre están siendo traducidas al inglés y al francés, igual que la estampa que la identifica, para que en esos idiomas también se ore en su nombre.


Seis años de trámite silencioso
En rigor, la causa de la beatificación y canonización de María de Lourdes del Santísimo Sacramento (cuyo nombre de bautismo es Mayorina Josefa Para Scaglia) se inició hace algo más de seis años, el 6 de abril de 1999.

El trámite comenzó luego de que la superiora general y el consejo generalicio de la congregación le encomendaran al clérigo Carlos Costa la postulación de la religiosa. La elección del sacerdote no fue azarosa. Además de vivir en la misma ciudad que la candidata, el padre Costa se especializó en trámite de canonización en el mismo Vaticano.

A partir de allí comenzó un derrotero que lo llevó a recabar tanto documentación como testimonios en distintos lugares de la provincia y el exterior. Fue a México y a España a indagar a religiosas que vivieron en Rosario con ella o que la conocieron; también atendió a testigos de Kenia y Africa, que viajaron para prestar su declaración; recibió a quien fuera la superiora general de la orden, la madre Rosa Marta; y también viajó desde Africa la actual superiora de Rosario, madre Loreley.

"Estuve en Turín porque los papás eran de esa ciudad y fui a buscar datos parroquiales de los pueblos donde fueron bautizados, para formar el contexto familiar. Y en este momento se está haciendo en México un estudio grafológico, porque la escritura de una persona da cuenta de su carácter, temperamento y actitudes", explicó.

Todo ese trabajo se hizo en silencio. Pero ahora, avanzada la etapa diocesana, era hora de hacer conocer la postulación, aunque el sacerdote no arriesgó plazos para terminar la investigación.

Ni bien comenzó la causa de canonización, María de Lourdes pasó a convertirse en sierva de Dios. La etapa diocesana culmina cuando se junta toda la documentación y se la envía al Vaticano. Allí comienza la etapa romana, donde hay una aprobación inicial. Después se verifican que las tres virtudes de fe, esperanza y caridad fueron vividas en "grado heroico", o sea, al ciento por ciento, y el Papa firma entonces un decreto que declara "venerable" a la postulante.

A partir de allí, de operarse un primer milagro por su intercesión, se la declararía beata, y un segundo milagro permitiría su santificación. Por eso, religiosas y devotos de distintas partes del mundo formulan pedidos a Dios a través de ella.

"Ya tengo una cantidad enorme de cartas, tanto de Argentina como de otros países, que me hablan de ella. En México, Puerto Rico, Guatemala, Kenia y Tanzania es muy querida", dijo el padre Costa, para recordar que "cuando se abrió la causa escribió una religiosa de Estados Unidos contando sobre ella".

La beatificación está en marcha y avanza. Y hoy el Colegio Verbo Encarnado (La Paz 526) será escenario, a las 16, de un té show para recaudar fondos para la causa. Es que, si se dan todos los pasos, Rosario tendría su primera santa.
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La religiosa vivió en Rosario desde 1936 hasta 1988.

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