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 viernes, 29 de abril de 2005  
Un libro pensado para los chicos propone llevar la obra de Cervantes a la vida cotidiana

Hace cinco años, los educadores Alejandro Spiegel y Sergio Saposnic publicaron "Lo chicos y el Quijote. Aventuras para leer y pensar" (Homo Sapiens Ediciones), un libro que promueve la interacción permanente entre los lectores y el clásico. "Está tan vigente la obra de Cervantes que luego de 400 años sigue cabalgando saludablemente", dice Spiegel para referirse a las razones que lo llevaron a escribir la adaptación. El libro fue editado nuevamente este año y ya es materia de lectura y trabajo en distintos países latinoamericanos.

Pero hay más: el libro, además de ser recomendado para niños, jóvenes y adultos, es casi una excusa para debatir sobre el legado que se desprende de las aventuras del Hidalgo Caballero de La Mancha. Por eso incluye una permanente referencia a la actualidad. El texto surgió como resultado de la obra de teatro que tenía el mismo nombre y donde se desafiaba a los más pequeños y adolescentes a asumir nuevas "quijotadas". Luego de cada representación, recuerda Spiegel, los chicos pedían seguir leyendo.La representación en escena de algunos pasajes del clásico escrito hace 400 años resultó una invitación constante para intercambiar visiones sobre valores como la amistad o la solidaridad. Por la obra teatral pasaron unos 40 mil alumnos de todo el país que tienen entre 6 y 14 años, además de algunas experiencias puntuales de chicos del polimodal, quienes se sumaron a la propuesta de imaginar por qué ideales emprenderían hoy un camino similar al del Quijote.

"Las conclusiones de esos encuentros son impresionantes", dice Spiegel para luego agregar: "Para los chicos del polimodal, por ejemplo, era la posibilidad de desafiar e imaginar cosas que otros no veían, además de representar una oportunidad de expresarse libremente, por fuera de los marcos formales conocidos".

Para Spiegel, el humor es clave cuando la obra llega a los más chicos. "Pero, además, el personaje de Sancho Panza cobra especial lugar para estas edades, por ser alguien simpático, sencillo, que rescata valores como la amistad", señala el autor.

En tanto que para todas las edades la obra -considera- representa una especie de contracultura, donde la derrota cobra una connotación diferente al modelo exitista que hoy impera.Sin embargo, Alejandro Spiegel hace hincapié en la magia del libro como clásico. "No por nada ha perdurado. El Quijote como el Martín Fierro tienen algo de magia", añade, y enfatiza en la necesidad de dejar lugar "al placer a la hora de leerlo en la escuela, que no signifique sólo hacer una tarea".

Según adelantó Spiegel a La Capital, "Los chicos y el Quijote" promete reencontrarse con los alumnos rosarinos en septiembre, en una actividad especial dedicada a resaltar la obra de Cervantes.

En pocas palabras, el libro editado por Homo Sapiens es una adaptación de "El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha", de poco más de 100 páginas e ilustrado por Horacio Sánchez Fantino. Recoge distintas aventuras del clásico, con comentarios, preguntas y textos de otros grandes de la literatura que hablan de lo que le pasa al Quijote en ese momento del relato. También se incluyen frases de la novela de Cervantes, escogidas por los autores.
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