Piden controlar teléfonos de las cárceles para evitar los "secuestros virtuales"

La Justicia inició negociaciones con las empresas para que se prevenga a los usuarios sobre la maniobra

La fiscal federal de San Isidro, Rita Molina, le pidió al director del Servicio Penitenciario Federal (SPF) que se controle de alguna manera a los presos que usan los teléfonos públicos de los pabellones para poder identificar a los reclusos que realizan los secuestros virtuales.

Voceros del Ministerio de Justicia revelaron que, al margen del pedido de la fiscal, desde esa cartera ya se iniciaron negociaciones con las empresas telefónicas para buscar una solución técnica al problema.

Es que la mayoría de los denominados secuestros virtuales son realizados desde las cárceles por presos que llaman a un número al azar, dicen que secuestraron a "un familiar" y piden como rescate dinero o tarjetas de pulsos telefónicos, cuando en realidad es una farsa.


Códigos
Si cuentan con un cómplice en libertad, los falsos secuestradores le indican a su víctima el lugar donde deben hacer la entrega del dinero, pero de lo contrario, le piden que compre tarjetas telefónicas y le dicten los códigos, ya que dentro de la cárcel, los pulsos telefónicos son muy preciados y se utilizan como dinero porque les permite hablar con familiares y abogados.

El problema que advirtió la fiscal Molina es que si bien con los rastreos telefónicos, en la mayoría de los casos, se logra llegar al teléfono público del penal de donde provino la llamada, es imposible identificar entre la población carcelaria al interno que la efectuó.

Por ese motivo, en un escrito dirigido al director nacional del SPF, inspector general José Luis Soria, la fiscal le solicitó que "implemente los medios necesarios a fin de que en las unidades carcelarias, se prevean mecanismos de registro y control de los internos que utilizan el sistema de telefonía".

"La solicitud obedece al hecho de haberse detectado en los últimos meses una multiplicidad de llamados extorsivos originados en las dependencias carcelarias a su cargo de quienes, creando una puesta en escena, solicitan rescate en base a un presunto secuestro en verdad inexistente", explica la fiscal en el escrito.

Molina advirtió además que los secuestros virtuales "producen una distracción del personal policial especializado en casos de secuestros extorsivos, y un mayor desgaste al ámbito jurisdiccional llamado a investigar los mismos".

Telefónica y Telecom ya implementaron un sistema de advertencia, mediante un mensaje de voz, que le avisa a la persona que recibe la llamada, si esa comunicación proviene de un penal.

El problema es que ese mensaje grabado sólo se emite cuando el preso utiliza el sistema de cobro revertido que brindan Telefónica y Telecom, pero no cuando quien llama desde una cárcel usa el sistema 0-800 de las tarjetas de pulsos telefónicos, que ellos mismos piden como rescate. (Télam)