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 miércoles, 29 de septiembre de 2004

Plan Cóndor: pidieron 15 años de prisión para Arancibia Clavel

La fiscalía y la querella coincidieron ayer en pedir 15 años de prisión para el ex agente de inteligencia chileno Enrique Lautaro Arancibia Clavel, acusado del secuestro de dos mujeres de esa nacionalidad en el marco del denominado Plan Cóndor, mientras que la defensa solicitó la absolución del imputado.

El pedido se formalizó en la segunda jornada del juicio oral y público que el Tribunal Oral Federal Nº5 (TOF5) le sigue a Arancibia Clavel, sobre quien ya pesa una condena a reclusión perpetua por el doble homicidio del general chileno Carlos Prats y su esposa Sofía Cuthberth, cuando fue dinamitado el automóvil en que viajaba el matrimonio.

En esta oportunidad, Arancibia Clavel -un ex miembro de la Dina, policía secreta pinochetista- está imputado del secuestro, el 12 de julio de 1977, de Laura Elgueta Díaz y su cuñada Sonia Magdalena Díaz Ureta, dos mujeres chilenas posteriormente liberadas y obligadas a abandonar el país.

En su alegato, la abogada Alcira Ríos -quien junto a Luciano Hazan ejercen el patrocinio de las querellantes- entendió que era un "hecho incontrastable" la participación del imputado en esa "operación típica del Plan Cóndor" al que definió como "un acuerdo planificado de las dictaduras (sudamericanas) para perseguir a opositores políticos".

La abogada insistió en la calidad de imprescriptibles que tienen los delitos de "lesa humanidad", tal como recientemente lo ratificó la Corte Suprema de Justicia y citó los tratados internacionales incorporados a la Constitución nacional.

A su turno, la fiscal María Graciela Fernández Orge se sumó al planteo de la querella y afirmó que estaba "totalmente probado", por "testimonios absolutamente contestes y avalado por documentación".

Sobre el carácter de "imprescriptibles" de los delitos contra los derechos humanos, la representante del ministerio público también dedicó buena parte de su alegato y sostuvo que ello obedece a que "la herida producida en la sociedad sigue abierta".

Por su parte, la defensa de Arancibia Clavel puso énfasis en contradicciones de los testigos que consideró fundamentales para demostrar que "no hay acusación", por lo que solicitó la "absolución lisa y llana" de su asistido.

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