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Con Eduardo Mondino, defensor del Pueblo de la Nación

-Frente a la crisis energética, ¿cree que el Estado debería ser quien realice las auditorías sobre las reservas de gas y petróleo con que cuenta el país?

-Venimos planteando desde hace tiempo recomendaciones de lo que creíamos era el problema acuciante: la gestión del gas, que en el caso de Argentina es un combustible central. Por las características que tiene y porque es principal alimentador del sistema de generación eléctrica. Se debe analizar el marco de cómo se dieron las cuencas en Argentina y cómo están hoy. Creo que el Estado debe auditar las reservas. Ningún Estado en el mundo, más allá de las políticas que aplique, privatista o no, no conoce cuál es su reserva en materia de energía. La energía es una cuestión estratégica para cualquier país. Por eso se debería discutir el armado de un diseño de las exportaciones de gas natural que no complique el mercado interno.

-¿Cómo ve la política del gobierno en materia de servicios públicos?

-El gobierno hasta ahora llevó una política de tarifas que no incidió sobre los sectores residenciales pero no hay una discusión a fondo de los contratos. Hay sectores que firmaron actas acuerdos, que en realidad no significan mucho. Creo que en el segundo semestre del año vendrá la discusión final sobre cuál será el modelo de contrato de servicios público que tendrá la Argentina a futuro. Sólo fue mostrando una voluntad de regular más, después hay que cumplirlo.

-La última vez que se intentó hablar entre gobierno y consumidores terminó en escándalo. ¿Qué opina?

-No había voluntad de las partes en llevar adelante la audiencia pública. Los únicos que pudieron hablar fueron las empresas.

-¿Cuál es su posición en torno a la renegociación de la deuda en default?

-Vamos a seguir defendiendo el derecho a la propiedad, garantizado por la Constitución, que se violó en aquel momento. Tenemos una presentación judicial, que esperamos que la Corte Suprema en algún momento decida tratarla, como trató las presentaciones individuales. En aquel momento se decidió salvar un sistema financiero absolutamente desvirtuado, en lugar de la institución ahorro, institución que en todo país significa desarrollo. Hoy muchos de los problemas de financiamiento en Argentina tienen que ver con esa institución tan vapuleada: el ahorro.

-¿Las Afjp quedarán mucho más expuestas a demandas si aceptan la reestructuración de los títulos en default?

-Las AFJP tienen un problema que lo tienen que resolver ellas: administraron mal los fondos de aquellos que confiaron en ellos y, además, en algún momento decidieron operaciones que no fueron conminadas a hacerlas. No defendieron los intereses de sus afiliados. Una responsabilidad que trascendía al deseo de un ministro de canjearles bonos. Hay una responsabilidad del Estado, también de las AFJP, que tendrán que resarcir a sus afiliados. Si aceptan la reestructuración quedan mucho más expuestos de su mal manejo.