| miércoles, 12 de mayo de 2004 | Entre la cruda denuncia y el romance Ismael Serrano sabe que suena parecido a Joan Manuel Serrat cuando canta y no lo niega. Lo que le molesta -y lo dice sobre el escenario- es que se confunda su trabajo con un mero ejercicio de emulación nostálgica. Por eso sus canciones ponen acentos sobre temas duros como el atentado del 11 de setiembre en Manhattan ("Zona Cero"), en torno a las luchas que se iniciarion con el Mayo Francés ("Papá cuéntame otra vez"), y el "Proceso" argentino ("A las madres de mayo").
La convicción ideológica que demuestra el músico convalida su discurso artístico y lo rodea de un aura romántica. El curioso correlato de la labor del juglar como cronista de lo peor de su tiempo, es que despierta gran adhesión entre las jovencitas. Las chicas, como lo hicieron las adolescentes de los 70 con Serrat, hoy suspiran por Serrano. enviar nota por e-mail | | |