Kirchner instó a que no suba el gas en garrafa

El primer mandatario advirtió que tomará medidas adicionales si no tienen cuenta los efectos sociales

El presidente Néstor Kirchner responsabilizó a los empresarios del sector energético por la crisis, les reclamó comprensión e inversiones para resolver la escasez y les advirtió que tomará todas las medidas que sean necesarias para que el país tenga el abastecimiento que requiere. Asimismo los instó a comprender los alcances de la crisis social que afecta al país y les reclamó que se abstengan de incrementar el precio del gas en garrafa.

Kirchner defendió la decisión de crear la Empresa Nacional de Energía y alertó que adoptará medidas adicionales si las empresas no tienen en cuenta los efectos sociales de la crisis y continúan aumentando el precio del Gas Licuado de Petróleo (GLP) envasado (garrafas) que consumen los sectores de menores recursos.

"Esperamos la comprensión de los señores empresarios sobre el gas en garrafa", disparó el presidente. De esta manera, el primer mandatario salió al cruce de las versiones que dan cuenta sobre el posible incremento hasta los 30 pesos en el precio de la garrafa de 10 kilos de Gas Licuado de Petróleo (GLP) que consume mayoritariamente la población de menores recursos.

"Ya dimos un paso, espero que ustedes den otro. No me hagan dar a mí otro paso más, les pido una clara comprensión de este tema", señaló Kirchner en alusión a la decisión del gobierno anunciada anoche de aplicar retenciones de 15 puntos a las exportaciones del Butano, el Propano y el GLP.

El presidente insistió en que es necesario que "empresas que gracias a Dios tienen un muy buen marco de rentabilidad, tengan comprensión de la situación que estamos viviendo".

Por su parte, el gerente de la Cámara de Distribuidoras de Gas Licuado de Petróleo (Cadigas), Javier Bauk, afirmó que el precio de la garrafa podría incrementarse más del 25 por ciento como consecuencia de los aumentos que vienen aplicando las petroleras, lo que provocaría una suba de 24 a 30 pesos por cada envase de 10 kilos.

"Lamentablemente el precio puede seguir aumentando porque estos días estamos recibiendo aumentos de las empresas fraccionadoras en distintos puntos del país. En la ciudad de Buenos Aires y otros puntos, una garrafa de 10 kilos sale 24 pesos y podría costar 30, esto es, 10 dólares", precisó Bauk.

El empresario señaló que si bien las empresas del sector están "reteniendo los aumentos que se recibieron en los últimos días para no trasladarlo a los usuarios", estimó que "difícilmente se sostenga el precio porque los incrementos no se detienen".

"Si sigue la escalada de precios podemos llegar a una garrafa de 30 pesos, más del 25 por ciento del precio actual", sostuvo el titular de Cadigas, al tiempo que señaló que desde la devaluación el precio de la garrafa se incrementó en un 140 por ciento.

Además, se quejó de que el gobierno "en absoluto" planteó la posibilidad de subsidiar al sector, a pesar de que la provisión de gas licuado beneficia a amplios sectores que carecen de redes de gas natural. También consideró que la crisis energética reconoce "problemas estructurales, porque algunos debieron invertir y no lo hicieron, y otros debieron controlar, y no controlaron".