Los legisladores piden al Ejecutivo que destine más fondos para la policía y las cárceles

El Parlamento logró acuerdos para endurecer penas contra algunos delitos

La discusión de los proyectos puso sobre la mesa profundas diferencias ideológicas sobre el combate al crimen

El justicialismo y el radicalismo consensuaron ayer, tanto en el Senado como en Diputados, los proyectos que formarán parte del paquete de leyes contra la inseguridad que se discutirá hoy en las sesiones especiales convocadas en las dos cámaras.

En Diputados, tras una reunión de más de cuatro horas, hubo acuerdo para agravar las penas por robo con armas de fuego y para convertir en delito la portación ilegal, pero aún existen diferencias sobre una iniciativa que plantea limitar la facultad de los jueces para otorgar la libertad anticipada de los condenados.

Este tema provocó divisiones en el propio oficialismo entre quienes opinan que se deben endurecer las penas para poder combatir el delito y aquellos que sostienen que no es agravando las condenas que se podrán bajar los índices de la delincuencia.

Finalmente, las divergencias surgidas entre las dos posiciones, encarnadas por Carlos Ruckauf y Jorge Casanovas, partidarios de la llamada "mano dura" por un lado, y la ex secretaria de Justicia bonaerense María del Carmen Falbo, por el otro, fueron zanjadas en una reunión previa de la mesa de la bancada.

A la reunión de la comisión de Legislación Penal, que se desarrolló en el edificio anexo del Congreso, concurrió Juan Carlos Blumberg, padre del joven secuestrado y asesinado el 23 de marzo pasado. Precisamente, Blumberg intervino en el debate y recomendó a los legisladores "tratar cosas específicas y concretas" y "olvidarse de los partidismos". "Trabajemos como gente civilizada", sostuvo ante los miembros de la comisión.

De todos modos, la posición definitiva que llevará hoy el oficialismo a la sesión especial convocada para las 11 en la Cámara baja se adoptará en un plenario del bloque, donde se espera un largo debate sobre los proyectos destinados a dar una respuesta frente a la crisis de inseguridad.

En forma paralela, el Senado avanzó en un proyecto impulsado por el radical Jorge Agúndez, que apunta a limitar la libertad condicional en los casos de los condenados por hechos gravísimos como el secuestro seguido de muerte, por lo que será tratado en la sesión de hoy.

El texto definitivo de esa iniciativa se concilió anoche en una reunión de la comisión de Justicia y Asuntos Penales, en la que también se decidió avanzar en la redacción de un proyecto que regula la venta de aparatos de telefonía celular, otro de los puntos incluidos en el petitorio presentado por Juan Carlos Blumberg.

La reunión de la comisión, que trabajó con la mitad de los legisladores que la componen, duró más de dos horas como consecuencia de las discusiones entre quienes pretendían más firmeza en las penas y quienes defendían el sistema actual. En el primer grupo estaban los peronistas Jorge Capitanich, Mario Daniele y Sonia Escudero; el radical José Mazzoni y Ricardo Gómez Diez. Del otro lado, la frepasista Diana Conti, los peronistas Liliana Negre y Nicolás Fernández, y el radical Jorge Agúndez.

Estas discusiones, que incluyen las redacciones finales de varios proyectos, se intentarán agotar hoy por los bloques del PJ y de la UCR. En tanto, los presidentes de los diferentes bloques fijarán al mediodía el horario y el temario definitivo de la sesión.

En cambio, hay un proyecto en el que existe consenso entre los diferentes bloques: se pedirá al Poder Ejecutivo que destine los fondos necesarios para el funcionamiento de la política carcelaria y de seguridad y se pedirá que cumpla con las reglamentaciones pendientes sobre leyes referidas a estos temas. (Télam y DyN)

Blumberg pidió a los legisladores "tratar cosas específicas y concretas".