Los precios de la ropa empujaron la inflación de marzo al 0,6 por ciento

La indumentaria creció 6,8%. También subieron educación, salud y carne. Bajó el rubro esparcimiento

El índice de precios al consumidor (IPC) aumentó el 0,6 por ciento durante marzo en comparación a febrero, con lo cual en el primer trimestre del año la inflación acumuló un alza del 1,1 por ciento, según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

Los datos oficiales aseguran que la suba del precio de la ropa, que por el inicio de una nueva temporada aumentó 6,8 por ciento, fue el principal responsable del alza en el costo de vida. Situación paradójica si se tiene en cuenta que la persistencia del clima veraniego en pleno otoño tiene atormentados a los comerciantes, que cuentan con un importante stock de ropa de invierno sin vender.

En tanto, el índice de precios mayoristas subió durante marzo también un 0,6 por ciento, mientras que el costo de la construcción mostró un crecimiento del 1,3 por ciento al calor de una importante recuperación del sector.

La suba del precio del costo de vida, que algunos analistas privados y funcionarios calculaban en torno al uno por ciento, mostró fuertes oscilaciones según los diferentes rubros, e incluso dentro de cada uno de ellos.

En este marco, al incremento registrado en el rubro indumentaria se le sumaron además una suba del 2,1 por ciento en los costos de atención médica en general (gastos para la salud) y del 2 por ciento en educación, basado fundamentalmente en un incremento del 2,7 por ciento en las cuotas de los colegios.

Estas escaladas fueron "compensadas" en términos estadísticos por una baja del 4 por ciento en el rubro esparcimiento.

Incluso, el costo de la canasta básica alimentaria, el cual sirve para fijar el límite por debajo del cual se cae en la indigencia, retrocedió un 0,1 por ciento.

Claro que ciertos aumentos tienen ponderaciones diferentes. Así el aumento del 15 por ciento en la tarifa de los taxis, que solo repercutió en Capital Federal, pesó en la cuenta final un cuatro por ciento.


Carne y puchos
Otros consumos más extensos a nivel geográfico, como la cuotas de la medicina prepaga (que aumentaron 6%), la carne picada (5,8%) y los cigarrillos, con una suba del 6,9 por ciento, impactaron menos el índice.

Los alimentos y bebidas subieron 0,4 por ciento y aquí se destacó el alza del 23,1 por ciento en la naranja, del 23,48 por ciento en el queso reggianito, 14,04 por ciento en el jamón cocido, 7,43% en la nalga y 6,08 por ciento en el asado.

En el mantenimiento de la vivienda y sus servicios básicos hubo un crecimiento de los valores del orden del 0,4 por ciento, producto de un aumento de 0,2 por ciento en los alquileres y 0,8 por ciento en las reparaciones.

En transporte y comunicaciones se verificó un alza de 0,3 por ciento.


Las frutas en baja
Todos estos incrementos en los costos fueron "compensados" de acuerdo con la medición del Indec con fuertes descensos en las frutas y verduras de estación.

Otro factor que ayudó a que el aumento del índice no sea mayor es la estabilidad en los costos de los servicios, que sólo se incrementaron el 0,2 por ciento, contra el 0,9 por ciento de los bienes.

Estas subas se dan en un contexto de retracción del precio del dólar que durante marzo que rondó los 2,85 pesos por unidad, el más bajo en lo que va del año.

El ministro de Economía, Roberto Lavagna, estimó que este año la inflación minorista rondará entre el 9 y 11 por ciento, por encima del 3,66 por ciento del 2003, aunque alertó que el aumento del 2004 "podría ser menor" al estimado en el presupuesto.

Por el lado de los precios mayoristas, la suba del 0,6 por ciento estuvo apuntalada por incrementos del 0,9 por ciento en los productos manufacturados y en la energía eléctrica, los que fueron compensados por una merma del 0,3 en el costo de los productos primarios locales.

Mientras el precio del ganado vacuno cayó un 6,4 por ciento a nivel mayorista, la carne experimentó una suba del 2,4 por ciento en el mostrador.

La presión en el mercado mayorista, que en gran medida determina la evolución del IPC en el futuro próximo, empezó a registrar el incremento de tarifas. Así, el rubro Petróleo y gas aumentó 0,4%, cifra a la que se llega computando un incremento del 0,8% en este último producto. Los precios de la energía eléctrica aumentaron, en tanto, un 0,9%.

En los peores momentos de 2002, cuando los alimentos subían por las nubes, el Indice de Precios al Consumidor (IPC) se mantuvo en gran medida por el congelamiento de tarifas de servicios públicos. Estos precios comenzaron a moverse ahora, con valores retroactivos al mes de febrero, en el caso de electricidad y gas.

Si bien los aumentos están orientados básicamente al sector industrial, de distintas maneras esos mayores costos terminarían trasladándose al consumo minorista.

En cuanto a la construcción, cuyo nivel de actividad fue superior a un 33 por ciento respecto al año pasado, el alza de los precios alcanzó al 1,3 por ciento durante marzo, con picos del 2,2 en materiales, 0,2 en mano de obra, y 0,4 en gastos generales.

Desde comienzos de año, este sector registra un aumento del 5,4 por ciento en sus costos, con un avance del 6,7 por ciento de la mano de obra.