El gobierno de Berlusconi puso en marcha el salvataje de Parmalat

Fue por medio de un decreto. El gigante tiene un vacío financiero de por lo menos 5.000 millones de dólares

Milán. - En un intento por frenar el derrumbe financiero de Parmalat, en lo que ya es una de las peores crisis empresariales europeas, el gobierno de Silvio Berlusconi aprobó un decreto para auxiliar a grandes empresas amenazadas por la bancarrota. Esto le permite armar a partir de hoy el salvataje de la empresa láctea. Pero los fiscales ampliaron ayer la investigación por el fraude multimillonario -un vacío financiero de unos 5.000 millones de dólares en las cuentas- del gigante de los lácteos italiano. A su vez, el gobierno de Berlusconi anunció que pedirá a la comisión europea una exención de las reglas que controlan las ayudas estatales a la industria láctea, una medida que le permitirá asistir a los proveedores de Parmalat.

"El gabinete aprobó un decreto ley para la reestructuración de empresas grandes que enfrentan la quiebra", expresó el ministro italiano de Industria, Antonio Marzano.

Ayer, el Bank of America, el tercer banco de Estados Unidos, expresó que una serie de documentos financieros clave habían sido falsificados. Mientras Parmalat se preparaba para declararse en bancarrota, un abogado que representa a Bank of America dijo que se había presentado un comunicado a un grupo de fiscales en Milán en el que se daban detalles de cuáles documentos del banco habían sido falsificados. Los títulos de Parmalat fueron suspendidos en la bolsa de Milán y la exclusión de su acción del índice principal bursátil Mib30 se hizo efectiva, indicó la empresa de bolsa italiana Borsa Italia.

El escándalo de Parmalat -que fue comparado con el del gigante estadounidense de la energía Enron-, estalló la semana pasada cuando se conoció de un "agujero negro" en las cuentas de unos 5.000 millones de dólares. Los medios italianos informaron que este "hueco" podría ser el doble de lo admitido por la compañía. De comprobarse se convertiría en el mayor caso de fraude de la historia de Europa. "El caso de falsificación de cuentas es bastante obvio", expresó el fiscal de la causa, Angelo Curto. Los balances de la empresa "no son creíbles", añadió.

Uno de los mencionados en la investigación comentó a los fiscales que la empresa era "una caja vacía", indicó una fuente judicial. El caso de Parmalat está alcanzando proporciones que lo convertirían en uno de los escándalos corporativos más grandes de Italia, y que dejaría pequeño al escándalo contable del grupo minorista holandés Ahold, de 1.000 millones de euros, y que puede compararse con el colapso del gigante energético estadounidense Enron.

En tanto, el Tesoro italiano convocó a una reunión de urgencia en medio de las preocupaciones del gobierno por los pequeños inversores que han perdido dinero en la crisis de Parmalat.

Parmalat tiene 35.000 empleados en 30 países. En América latina tiene presencia en Brasil, Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay, Ecuador, Colombia, Venezuela, México, República Dominicana y Nicaragua. Bank of America estuvo involucrado en otros aspectos de la red de Parmalat de inversiones y transacciones financieras que los fiscales ahora están tratando de desenredar. Bank of America diseñó un plan bajo el cual un grupo de inversores adquirió un 18% de la unidad brasileña del grupo alimentario. Sin embargo, ese acuerdo fracasó la semana pasada cuando la crisis de liquidez de Parmalat impidió que la empresa pagara 400 millones de dólares a los inversores para recomprarles la participación después de que la unidad no pudiera salir a bolsa.

Los plazos para esos pagos expiraron, lo que presenta la posibilidad de que Parmalat sea declarada en default. El lunes, la agencia calificadora Standard & Poor's dijo que la exposición de Bank of America dentro y fuera de los estados financieros de Parmalat es significativa pero manejable, dados sus grandes recursos. (Reuters y AFP)