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 miércoles, 29 de octubre de 2003

El juez Oyarbide reclamó pericias que acrediten si existió delito en Trabajo
Un fiscal pide la detención de los piqueteros denunciados por Tomada
Comparatore avanzó sobre el ala dura del movimiento de desocupados que bloqueó la cartera laboral

El fiscal federal Luis Comparatore solicitó ayer la identificación y, eventualmente, posterior detención de los piqueteros denunciados por el gobierno, aunque el juez Norberto Oyarbide ordenó pericias para determinar si los funcionarios del Ministerio de Trabajo fueron "privados" de su libertad hace una semana, o existieron vías alternativas de acceso a la cartera laboral. Si bien el presidente Néstor Kirchner recibió a dirigentes de la Corriente Clasista Combativa (CCC), una de las alas dialoguistas del movimiento de desocupados, para atemperar el escenario de confrontación, los sectores duros se declararon en alerta.

Por su parte, Oyarbide también citó para mañana, a las 11, al ministro de Trabajo, Carlos Tomada, para que declare como testigo en la causa abierta por presunta "privación" de la libertad.

La acción fue promovida por la cartera laboral contra los piqueteros que, entre el miércoles y el jueves pasados, impidieron la salida de funcionarios del ministerio, durante una protesta en demanda de planes sociales, alimentos y materiales para la construcción.

El juez solicitó también a la Policía Federal que realice en forma urgente un informe planimétrico sobre los distintos accesos que existen al ministerio, a fin de establecer si realmente existió el delito que se investiga.

Comparatore impulsó la investigación de la denuncia radicada por el gobierno formulando el requerimiento fiscal. Y tipificó los hechos como presunta "privación ilegítima de la libertad agravada".

Además de pedir que Tomada sea citado a declarar como testigo, Comparatore reclamó una testimonial de la secretaria de Trabajo, Noemí Rial; su par de Empleo, Enrique Deibe, y el jefe de gabinete de la cartera laboral, Norberto Schiaravino.

Oyarbide, a su vez, adelantó que convocará a "todas las víctimas" para que declaren. El juez también consideró que se trata de "un tema complejo y difícil" de dilucidar.

Asimismo, evaluó como "muy valioso que se cuente con la declaración de ministro y de todas las personas que se vieron envueltas en el hecho, que aparentemente les impedía dirigirse a sus domicilios".

En el requerimiento elevado a Oyarbide, el fiscal planteó la formación de una comisión de la Policía Federal a los efectos de identificar a las personas que, según Tomada, bloquearon las puertas de la cartera laboral.

Es que en la denuncia no se mencionó a persona alguna sino que sólo se identificó a los grupos que habrían tomado parte de la acción: Movimiento de Unidad Popular; Frente de Unidad de Trabajadores Desocupados (Frupate); Frente Independiente de Trabajadores Ocupados y Desocupados (Fitod); Movimiento de Unidad Popular 20 de Diciembre (MUP20) y Tendencia Clasista 29 de Mayo.

Según el fiscal, de demostrarse el hecho investigado e identificarse a sus autores, atendiendo a la posible comisión de un secuestro tipificado por el Código Penal, se debería proceder "a la inmediata detención de los presuntos responsables para su posterior declaración indagatoria".

Comparatore rechazó que se pretenda coartar los derechos ciudadanos ni "criminalizar la protesta social", pero enfatizó: "Se deben investigar hechos que, por sus características, pueden llegar a constituir delitos".

En tanto, las organizaciones piqueteras que hace una semana bloquearon el ministerio se concentraron en la Plaza de Mayo para reclamar la nulidad de la denuncia penal contra sus militantes. Además, entregaron un petitorio con esta exigencia en la Casa Rosada y volvieron a pedir ayuda social.

El ministro de Justicia, Gustavo Beliz, subrayó -a su turno- que la relación con los piqueteros "no ha cambiado". Y, en ese sentido, dijo que las protestas "deben tener un cauce de expresión respetuoso de las garantías individuales".

Beliz también minimizó la creación de la llamada brigada antipiquetes (ver aparte). "No sé porque se creó tanta expectativa. Las fuerzas de seguridad están trabajando como siempre", concluyó el ministro.

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Los piqueteros quedaron bajo la lupa del fiscal.

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