Año CXXXVI
 Nº 49.680
Rosario,
lunes  02 de
diciembre de 2002
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Ezequiel, tanto tiempo sin vernos

Ezequiel González, suplente de Boca, esperó al final de la primera etapa, cuando los canallas alternativos que tenía Russo salieron del banco visitante, y se fue conversando hasta la mitad de la cancha con Luciano De Bruno, que en el complemento reemplazaría a Vitamina Sánchez. Cuando se despidieron, Rivarola se percató de la cercanía del ex enganche canalla y se acercó para saludarlo. A todo esto, todo Boca se había metido en el túnel, por lo que el Equi debió hacer un pique corto para alcanzar a sus compañeros con los que seguramente tiene muchas menos cosas para charlar que con sus ocasionales adversarios de ayer.
Unos 60 chicos formaron un cordón para recibir al equipo de Boca en el campo de juego. Luego los pibes, que a esa altura habían convertido a la cancha en un kinder, posaron con la formación xeneize. Incluso Guillermo Barros Schelotto entró con sus hijos, los que después se fotografiaron con su tío Gustavo. "¿No era que no se podía entrar con chicos a la cancha, que te cobran multa?", se preguntó un plateísta. Parece que no, y que esa fue una buena excusa para impedir que el hijo del hincha ofuscado se quedara afuera.
La comisión de prensa de Boca se acercó al sector de periodistas antes del comienzo del encuentro para entregar un preservativo con la inscripción "Usalo siempre, que no te queden dudas. Informate, es gratis", y un pin con el símbolo de la lucha contra el sida. Todo en el marco del programa nacional de lucha contra el VIH/sida y otras enfermedades de transmisión sexual, promovido por el Ministerio de Salud de la Nación.
Cuando el partido terminó Abbondanzieri se dirigió hacia la popular de la Doce para arrojar guantes y la camiseta. La actitud del Pato se debió a que los hinchas que invadieron la cancha en el complemento se retiraron una vez que el arquero así se los solicitó.
Hasta el mediodía de ayer, Miguel Angel Russo no sabía si el quinto hombre en el banco de relevos sería Germán Rivarola o Juan Pablo Cárdenas. Previo a la salida del hotel, el técnico optó por Pirulo, quien no sólo ingresó en el complemento sino que también convirtió el único tanto canalla, el que sirvió al menos para alcanzar un resultado más decoroso.


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