El Tribunal Superior Electoral (TSE) reemplazó ayer en los comicios brasileños 4.274 urnas electrónicas en todo el país, informó la institución tras el cierre de los colegios electorales en la mayoría del país. De ese total, sólo 111 urnas fueron remplazadas por la votación manual tradicional. El porcentaje de urnas que presentaron problemas de las más de 400.000 instaladas en todo el país fue de alrededor del 1%, informó el secretario de informática del TSE, Paulo Camarao. Los problemas técnicos con las urnas y la complejidad de la votación -los brasileños tenían que realizar en realidad seis votaciones: presidente, gobernador, dos senadores por Estado, y las Cámaras federal y regional- fueron las causas de los retrasos.