El diputado justicialista Miguel Angel Toma se mostró ayer insatisfecho con la media sanción en la Cámara baja del proyecto de ajuste y destacó que la posición del partido "era totalmente contraria". Paralelamente, el gobernador de Santa Cruz, Néstor Kirchner (PJ), afirmó que con la aprobación de la iniciativa "una vez más se cumple la letra de la maldición de Malinche: «Fuertes con los débiles, débiles con los poderosos»".
Kirchner aludió en estos términos al proyecto sancionado en Diputados, que fijó un piso de 500 pesos para los sueldos de estatales y haberes jubilatorios que sufrirán un recorte del 13 por ciento con el propósito de asegurar un déficit fiscal cero.
"Es una falta absoluta de valentía de muchos dirigentes de la clase política que, como dice la maldición del Malinche, son «fuertes con los débiles, débiles con lo poderosos»", opinó el mandatario santacruceño.
Kirchner se refirió así a la indígena Malinche, amante del conquistador español Hernán Cortés, convertida en México en símbolo de la complicidad con la dominación extranjera.
En ese sentido, enfatizó que "bajo una justa premisa de presupuesto equilibrado, cosa que en el caso de Santa Cruz hace años que lo tenemos, buscan adecuar las cuentas sobre las espaldas de los jubilados y los trabajadores estatales".
"En realidad esto ocurre cuando todo el mundo sabe que los primeros baches presupuestarios se generaron por el descuento de los aportes patronales a las grandes empresas, muchas de ellas las privatizadas, y en la transferencia del sistema previsional a las AFJP", sostuvo Kirchner.
Según el gobernador (líder de La Corriente, una de las agrupaciones internas del PJ), "con la restitución de los aportes patronales, una adecuación del sistema impositivo regresivo que tenemos a uno progresivo, donde paguen los que más ganan, se podría haber solucionado con amplitud y no con más ajuste a la gente".
Recorte hacia abajo
"Con esto se lograría darle contención hoy, en forma urgente, a más de tres millones de jefes de familias desocupados y, a su vez, se evitaba este brutal recorte hacia abajo. Se lo hacía hacia arriba y se podía tener un presupuesto equilibrado", concluyó Kirchner.
A su turno, Toma subrayó: "No estoy satisfecho con la media sanción en la Cámara baja. La posición del justicialismo era totalmente contraria".
"No aceptamos que el ajuste, que necesariamente había que hacer, haya recaído sobre quienes lo hizo. Estoy muy preocupado porque las mismas causas que generaron la crisis económica siguen estando presentes", sentenció el diputado.