Rastreo satelital de las cárceles secretas de la CIA

Estrasburgo. - Imágenes satelitales podrían ayudar a determinar si la Agencia Central de Inteligencia (CIA) mantenía prisiones secretas en países europeos, según un legislador suizo que elabora un reporte para el ente supervisor de derechos humanos del continente, el Consejo de Europa.

El informe, presentado en Bucarest, fue elaborado por el político liberal suizo Dick Marty, presidente de la comisión jurídica de la asamblea parlamentaria del Consejo de Europa. Marty explicó que ha solicitado apoyo técnico del centro de seguimiento de satélites de la Agencia Espacial Europea (ESA) en España y que también pidió la colaboración de Eurocontrol, la organización de gestión del tráfico aéreo en la Unión Europea.

El político quiere que estas organizaciones aporten detalles sobre el movimiento de 31 aviones que supuestamente fueron usados por la CIA desde 2002 para transportar a presuntos terroristas.

Las imágenes que se tomen por satélite permitirían comprobar si son ciertas las acusaciones formuladas por la organización defensora de los derechos humanos Human Rights Watch según las cuales la CIA construyó o desmanteló prisiones secretas para presuntos terroristas desde principios de 2002 hasta la fecha, señala el informe. "Incluso en nombre de la guerra contra el terrorismo no puede ser tolerada la detención ilegal y el transporte secreto de detenidos en Europa", asegura un comunicado del Consejo de Europa emitido ayer.

Marty inició su investigación a comienzos de este mes de noviembre tras las informaciones publicadas en el diario Washington Post acerca de que EEUU había establecido ocho cárceles secretas en Polonia, Rumania y otros países del este de Europa.

Según Marty, se están realizando investigaciones criminales por este caso en España, Italia, Alemania, Noruega, Suecia, Suiza, Rumania y Polonia. En Italia y Alemania, se afirma en el informe presentado por Marty, se han iniciado investigaciones por el "secuestro" de personas que posteriormente fueron trasladadas a Guantánamo, Afganistán u otros centros de detención.

La fiscalía italiana, agrega el informe, ha emitido mandatos de detención contra varios agentes de la CIA, tras el secuestro del islamista Abu Omar en una calle de Milán en febrero de 2003.

Las autoridades judiciales germanas están participando en esa investigación y han iniciado otra en el caso de un ciudadano alemán de origen libanés, Jaled Al Masri, quien fue detenido por error en Macedonia y llevado a Kabul, donde fue interrogado.

Tanto Polonia como Rumania, así como la República Checa, Georgia, Letonia y Armenia emitieron desmentidos, los cuales sin embargo, a juicio del Consejo de Europa, fueron insuficientes. Por esta razón, el secretario general de la organización, Terry Davis, inició el miércoles una investigación formal al respecto.


"Un tema menor"
En Rumania, el ministro de Relaciones Exteriores, Mihai Razvan Ungureanu, sostuvo que no se hace "ningún problema" por estas pesquisas, a las que calificó de un tema "menor". El funcionario sostuvo que las autoridades en Bucarest no tienen ningún inconveniente en "invitar a cualquiera que quiera investigar el territorio" de su país. Por su parte, el nuevo ministro polaco de Defensa, Radoslaw Sikorski, afirmó que "no hay nada que investigar, no ha pasado nada".

Los países mencionados en este informe son miembros del Consejo de Europa y deben respetar la convención europea de derechos humanos, que prohíbe el transporte secreto de detenidos y la tortura. El rotativo alemán Handelsblatt publicó y citando fuentes de los servicios secretos de EEUU que siguen teniendo lugar vuelos secretos de la agencia de inteligencia con presos sospechosos de terrorismo.