La destacada de la semana

El asfixiante centralismo porteño

He leído con atención y recurrentemente desde el año pasado la prédica de La Capital en favor del traslado del Congreso nacional a Rosario como una contribución al federalismo. Sin los conocimientos suficientes me privo de emitir un juicio en favor o en contra. Pero quiero aprovechar para volcar alguna reflexión ya que coincidimos en que estamos disgustados con el modelo de país basado en la macrocefalia porteña. ¿Es justo que todo el país -con impuestos como el IVA del 21 por ciento- debamos pagarle a los bonaerenses y porteños 600 millones de pesos anuales en subsidios para los trenes del conurbano? ¿Es justo que banquemos a la Secretaría de Cultura de la Nación (300 millones anuales) que gasta todo su presupuesto en Capital Federal (museos, Instituto Nacional de Cine, Instituto del Teatro, etc)? ¿Es justo que sostengamos al Canal 7 cuyos periodistas, camarógrafos, directivos son todos de Buenos Aires? ¿Es justo que le paguemos el sueldo a todos los empleados del Ministerio de Educación de la Nación (2.000 agentes) que son todos de Buenos Aires, cuando todas las escuelas fueron transferidas a las provincias? ¿Es justo que todo el país (desde Usuhaia a la Quiaca) subsidie a las empresas de colectivos (compran el gasoil a 0,50 y el Estado paga la diferencia) sabiendo que el 80 por ciento de las empresas se encuentra en Buenos Aires y Capital Federal? Con todo esto, podríamos preguntar: ¿y dónde están los legisladores del interior? Me atrevo a responder: en Babia, al igual que la mayoría de los gobernadores. Ninguno pone estos temas en la mesa, no sea que el presidente se vaya a enojar.

Jorge Encina, DNI 13.449.654