Una Plaza en el corazón del horror

El gobernador Jorge Obeid inauguró el Centro Cívico en la ex Jefatura de Policía, en una conmovedora ceremonia

Miguel Pisano / La Capital

"«Sabemos que sos un perejil, pero acá nosotros somos Dios y aunque seas cristiano nunca te vamos a perdonar que seas un traidor a tu clase porque vos sos rico y vivís en un piso en Libertador. Lo que no te vamos a perdonar es que toques Beethoven para la negrada. Por eso te vamos a cortar las manos como hicimos con Víctor Jara en Chile y después te vamos a matar», me dijeron los torturadores uruguayos del Plan Cóndor. Y acá estoy, vivito y coleando", confió anoche el pianista y militante social tucumano Miguel Angel Estrella y arrancó la mayor ovación del concierto que ofreció en la conmovedora ceremonia de apertura de la Plaza Cívica de la Sede del gobierno provincial, en la mismísima y terrorífica ex Jefatura de Policía de Rosario, ante más de un millar de personas.

Darwina Gallichio, junto a otras Madres y Abuelas de Plaza 25 de Mayo, y Victorio Paulón (secretario de la UOM de Villa Constitución) abrieron literalmente el portón de la calle Dorrego, que permaneció cerrado hasta ayer y ahora se llama Memoria, en otro momento fuerte de la noche, así como luego las ex detenidas Laura Ojeda, Gloria Contelaro, Laura Corcetti y Analía Ferrari lo hicieron con el de Moreno, que bautizaron Justicia.

"Yo estuve dos días preso en junio del 75, cuando trajeron a todos los compañeros que habían participado del Villazo, cuando la Triple A copó Villa Constitución. Ese día cerraron las calles de afuera de la Jefatura y no las volvieron a abrir hasta que volvió la democracia", contó anoche el periodista Pato Mauro , un memorioso de "la gloriosa JP".

"Hablamos con Miguel Angel Estrella porque estuvimos presos en la misma época, él en Uruguay y yo en nuestro país, y esto es un homenaje a una generación que sufrió. La idea es no olvidar el pasado, a través de la memoria, y de construir ahora el futuro", recordó el gobernador santafesino Jorge Obeid a La Capital.

Antes del final Carlos Razzetti, el hijo de Constantino, el presidente del Banco Municipal asesinado por la Triple A, intentó formular un reclamo al gobernador pero fue persuadido de que no era esa la ocasión.

Anoche se destacaron el logo del Centro Cívico, que consiste en cuatro barrotes de una reja abiertos en el medio, que se repite en tres dimensiones en el monumento de la llama votiva, y los primeros siete murales de una serie de 21, diseñados por el arquitecto rosarino Javier Armentano.

Así, en el mismo sitio donde Feced y sus esbirros torturaban, mojaban a los presos en invierno y asesinaban, anoche los viejos militantes cantaron el himno con los dos dedos en V con sus hijos, esos pibes que no estaban ni en los sueños y que entonces no habrían podido ni pisar la vereda.

El pianista Miguel Estrella ofreció un concierto emocionante.