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 miércoles, 19 de octubre de 2005  
Saddam se declara inocente y dice que es presidente de Irak

Bagdad- El ex presidente iraquí Saddam Hussein y siete de sus ex colaboradores se declararon hoy inocentes durante la primera sesión del juicio que se llevó a cabo en Bagdad por una masacre perpetrada en 1982 en la localidad chiita de Dujail.

Al terminar la primera sesión, que duró casi tres horas, el juez que preside el Tribunal Especial Iraquí, el kurdo Risgar Mohammed Amin, anunció que la segunda sesión se celebrará el 28 de noviembre.

El defensor de Saddam, Jalil al Dulaimi, había solicitado antes de comenzar el juicio un aplazamiento de tres meses con el argumento de que había recibido las voluminosas actas hace apenas 25 días.

"Yo soy el presidente de Irak", contestó Saddam cuando el juez Amin le preguntó por su nombre. El ex dictador desconoció la legitimidad del tribunal con el argumento de que éste fue creado por una autoridad (Estados Unidos) a la que él niega reconocimiento.

Los siete coacusados de Saddam también se declararon inocentes. Además de Saddam Hussein, también se negaron a decir sus nombres el ex vicepresidente Taha Yasin Ramadan y el medio hermano de Saddam, Barzan al Tikriti.

La mayoría de los acusados vestían las tradicionales túnicas árabes, mientras que Saddam lucía un traje gris con una camisa blanca.

En la primera parte del proceso, el ex jefe de Estado iraquí y los otros siete acusados fueron enjuiciados por la masacre cometida en 1982 en la pequeña ciudad de Dujail, donde fueron asesinadas 143 personas.

Un grupo de hombres jóvenes intentó ese año matar al dictador a tiros, pero el atentado fracasó. Saddam lanzó después una operación militar como venganza contra los habitantes de la ciudad de Dujail, mayoritariamente chiita, situada al norte de Bagdad.

Saddam y los siete coacusados se sentaron en unas jaulas con barrotes delante del juez presidente. El derrocado dictador fue el último en entrar en la sala y después de saludar a los presentes se sentó al lado de su ex vicepresidente, Taha Yasin Ramadan.

Saddam intentó hablar antes de que se le formulara la primera pregunta, pero el juez presidente, Amin, le cortó la palabra. "Lo que está construido sobre la base de injusticia es injusto", afirmó Saddam en alusión al hecho de que el tribunal especial fue creado a iniciativa de las fuerzas de ocupación estadounidenses.

"No necesito identificarme", agregó el ex presidente, quien esgrimió como argumento que el pueblo de Irak que lo eligió presidente ya sabe quién es.

"Conservo mi derecho constitucional como presidente de la República de Irak", insistió Saddam Hussein. Amin, quien estaba secundado por otros cuatro magistrados, le pidió con una sonrisa que se sentara y comenzó su ronda de preguntas dirigiéndose a Awad Hamad al Bandar, quien era el presidente del Tribunal Revolucionario que condenó a muerte a numerosas personas durante el régimen de Saddam. (DPA)


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