Imputan a cuatro chef por haber pagado a ETA el "impuesto revolucionario"

El famoso Karlos Arguiñano fue citado a declarar

Madrid. - El juez de la Audiencia Nacional (la máxima instancia penal de España) Fernando Andreu citó a declarar a los chef vascos Juan María Arzak y Pedro Subijana para que se defiendan de las afirmaciones de un terrorista de ETA que los acusó de haber pagado el llamado "impuesto revolucionario". Ambos están imputados del delito de "colaboración con banda armada" por haber presuntamente pagado dinero a ETA. El famoso cocinero Karlos Arguiñano también fue citado, aunque en calidad de testigo.

El preso etarra José Luis Beotegui aseguró en sede judicial que los cocineros Arzak y Subjana habían pagado a ETA el "impuesto revolucionario". Los profesionales de la cocina, muy conocidos en España, declararán ante el juez como imputados del delito de "colaboración con banda armada".

En cuanto a Karlos Arguiñano, muy conocido en Argentina por sus ciclos en televisión, y Martín Berasategui, a quienes según Beotegui también se intentó extorsionar, previsiblemente declararán en calidad de testigos.

El etarra Beotegui aseguró al juez Andreu y en sus declaraciones ante la Guardia Civil que entre los empresarios a los que envió cartas exigiendo el impuesto revolucionario figuraban los cocineros vascos Juan María Arzak, Karlos Arguiñano, Pedro Subijana y Martín Berasategui.

Beotegui era uno de los encargados de enviar las cartas de extorsión a empresarios vascos, según reconoció él mismo ante el juez Andreu. Señaló que envió cartas extorsivas a los cuatro conocidos chef vascos en las que les pedía 12 millones de pesetas a cada uno (72.121 euros).

Beotegui, que tiene un vínculo familiar con la esposa de Juan María Arzak, afirmó que este último acudió a verlo en su nombre y en el de Subijana para gestionar una reducción del pago de los 12 millones de pesetas solicitados inicialmente. Arzak le pidió, según afirmó Beotegui, que rebajara la cantidad a la mitad, 6 millones de pesetas (36.060 euros). De esta forma, tras consultarlo con la dirección de ETA, acordaron que los 6 millones restantes se fueran pagando en los seis años siguientes, a 1 millón por año.

Beotegui aseguró que tanto Subijana como Arzak le abonaron esos 6 millones de pesetas y que, sin embargo, no recibió el dinero los otros dos, por lo que desconoce si llegaron a pagar o no.


"Eliminan la presunción de inocencia"
El caso ha provocado enojo en ambientes políticos vascos. Un senador del partido que gobierna País Vasco, el PNV, Iñaki Anasagasti, ha denunciado el "gran linchamiento" que a su juicio se está produciendo contra los cocineros vascos y lamentó que en este caso se haya "eliminado la presunción de inocencia".

En el mismo sentido se ha manifestado el secretario general de la Confederación Empresarial Vasca (Confebask), José Guillermo Zubia, que calificó de "absolutamente repudiable el linchamiento moral que se está produciendo" con los cuatro cocineros vascos. La portavoz del gobierno regional, Miren Azkarate, mostró su "apoyo y solidaridad" a los cuatro, y subrayó que "la única culpable es ETA", al tiempo que recordó que "los juicios públicos habrá que hacerlos a quienes extorsionan, no a quienes son víctimas de esas extorsiones".