| domingo, 08 de agosto de 2004 | Los mensajes publicitarios y la alimentación del bebé Todos sabemos que los medios televisivos se sostienen por la publicidad de una gama amplia de productos susceptibles de ser comprados. Si bien la finalidad de las publicidades en uno tan masivo como la televisión es persuadir a los televidentes a comprar un determinado producto, también dejan mensajes que en algunos casos pueden estereotipar, crear o cambiar situaciones de la vida cotidiana. Particularmente se nota que son muchas las que tienen como protagonistas la relación de bebés, madres y padres en el momento de alimentarse.
Cabría recordar que ser padres y madres remite a funciones que son construcciones histórico sociales que tienen gran variabilidad a través de los tiempos de una misma cultura o, dentro de ella, en diferentes clases sociales, y que por lo tanto no es algo que nace instintivamente o naturalmente en todas las mujeres y hombres.
Todo niño se inicia en el mundo que lo rodea a través de los cuidados fundamentalmente maternos. En esta etapa evolutiva pasa de la indiferenciación psíquica del recién nacido al establecimiento de una intensa relación afectiva con la madre, vivida como alguien distinto a sí mismo; el aprendizaje de esta diferencia se va adquiriendo gradualmente a través de la relación diaria durante la lactancia.
Desde el amamantamiento, el acto de alimentar va acompañado de contacto, miradas, palabras y cuidados que van convirtiéndose en un "juego relacional" que si funciona con la finalidad de alcanzar una posición de equilibrio entre las necesidades del niño, el deseo de la madre y el ambiente, posibilitará la construcción de la autonomía e individuación del bebé.
Si bien todos los niños podrían ser amamantados en forma exclusiva hasta los seis meses de edad, a partir de este momento se deberían ir incorporando en la dieta otros requisitos alimentarios, sobre todo calóricos. Es aquí donde el papá puede ir incluyéndose en el momento de la alimentación, y el bebé va ampliando su horizonte de relaciones.
El niño comenzará a partir de este momento a tomar contacto en forma paulatina con sabores y consistencias, con los que experimentará y jugará (el juego es la forma esencial con la que cuentan los niños para la exploración del mundo material). Pero el hecho de ir tomando contacto con los alimentos sólidos no significa instaurar un nuevo juego en el momento de la alimentación, sino que es una continuación del vínculo que se inició con su mamá en el acto de alimentar, y que está compuesto de miradas, palabras y cercanía.
Es importante tener presente estos aspectos psicológicos mencionados anteriormente a la hora de transmitir mensajes publicitarios. Quizás vaya siendo momento que las empresas publicitarias puedan vender sin confundir.
Comisión de Perinatología y Primera Infancia Colegio de Psicólogos de Santa Fe II Circ. [email protected] enviar nota por e-mail | | Fotos | | En general, las publicidades muestran ejemplos que no se condicen con la realidad cotidiana. | | |