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 jueves, 08 de noviembre de 2007  
Arsenal y River no se sacaron diferencias y definen el martes

Buenos Aires.- Arsenal no pudo hacer fuerte de local y sólo brindó un desprolijo empate en cero con River Plate, en el duelo de ida entre equipos argentinos, por las semifinales de la Copa Sudamericana.

Si bien ambos tuvieron chances para desnivelar y empezar a definir la serie, les faltó precisión y no pudieron quebrar la paridad.

El ganador de esta serie, cuyo desquite será dentro de una semana, se medirá en la final contra quien salga airoso en la otro semifinal, en la cual América de México venció 3-2 a Millonarios de Colombia, el miércoles en Bogotá.

“Nos está costando ganar de local”, dijo el delantero de Arsenal José Luis Calderón.

Muchas imprecisiones y muy pocas llegadas claras. Esa fue la tónica del primer tiempo del partido ante unas 17.000 personas en el estadio de Arsenal, en la vecina ciudad de Sarandí.

Recién a los 24 minutos el perfume de gol lanzó su fragancia, cuando el arquero de River Juan Pablo Carrizo salvó con una pierna un disparo a quemarropa de Sebastián Carrera, en lo que fue la jugada más clara de gol de la primera parte.

“Es obvio que no fue un buebn partido”, dijo el defensor de River Eduardo Tuzzio.

River se hizo notar antes, con disparos de media distancia que en todos los casos fueron controlados sin problema alguno por Mario Cuenca, tal como ocurrió a los 7 minutos con un disparo del colombiano Radamel Falcao García y poco después con otro de Oscar Ahumada.

En el complemento todo siguió igual o peor, al menos durante el primer cuarto de hora donde no pasó nada de nada.

Dentro de una serie de jugadas intrascendentes, la frialdad de esa etapa se quebró a los 84 minutos cuando Diego Buononatte le pegó desde el borde del área grande y la mandó afuera.

En el descuento, Mario Cuenca salvó a Arsenal cuando atajó magistralmente un disparo de Fernando Belluschi.

Fue un flojo partido entre River, un grande del fútbol ya que se consagró varias veces campeón a nivel nacional e internacional, y un Arsenal que carece de títulos de fuste en sus vitrinas. (AP)


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