Confesó el autor del asesinato en un ciber

Buenos Aires.—Fernando Avallay, el hombre detenido el miércoles pasado por el crimen de Franco Campeggi en un ciber de Moreno, confesó haber asesinado al nene de 12 años de un balazo durante el asalto, aunque se defendió diciendo que se le escapó el tiro.

   Avallay, de 30 años, fue indagado ayer a la mañana durante tres horas por el fiscal de Moreno a cargo del caso, Horacio Chiminelli. Allí y ante la presencia de su defensor oficial, Héctor Baltar, Avallay dijo que se le escapó un tiro cuando estaba revisando una caja registradora del negocio donde, además de un ciber, funciona un quiosco.

   Fuentes judiciales indicaron que la versión de Avallay no convenció al fiscal, que cree que, en realidad, el ladrón efectuó el disparo que ingresó por la nuca de Franco intencionalmente, molesto por el poco dinero que pudieron robar en el lugar el pasado 23 de septiembre.



Discrepancia. Los voceros explicaron que, de acuerdo con la declaración de los testigos, entre ellos el dueño del ciber y la empleada a cargo del quiosco, Avallay fue el maleante que estaba armado. La declaración de los comerciantes no coincide con la de Avallay, ya que los testigos dijeron que la detonación se escuchó cuando los dos ladrones escapaban después de haber robado y no cuando revisaban la caja registradora, como dijo ayer el imputado.

   El fiscal está convencido de que Avallay disparó con intención y por eso le imputa un homicidio calificado “criminis causa”, es decir matar para ocultar otro delito, en este caso el robo, para ganar impunidad.

   Las fuentes también indicaron que existen contradicciones entre las indagatorias de Avallay y la que prestó antes de fugarse de un hospital, el otro autor confeso del asalto, Carlos Godoy. Es que Avallay dijo ayer que él se encargó de ir a asaltar a la quiosquera, cuando Godoy y los testigos indicaron que en realidad fue el que encañonó al dueño del ciber, del lado donde estaba sentado Campeggi y el resto de los chicos que chateaban en las computadoras.



Cebollita. Por el caso, primero se detuvo a un chico de 16 años conocido como Cebollita porque el hermano de la víctima lo identificó como quien estaba con el asaltante que mató a Franco, lo cual derivó en que la casa de ese acusado, que luego se reveló inocente, fuera incendiada por los vecinos.

   Pero luego la policía detuvo a Godoy, que, tras confesar su participación en el hecho, fue llevado a un penal, pero como resultó herido en una pelea con otros presos fue internado en el hospital de Merlo, de donde se fugó la madrugada del sábado pasado. (Télam)