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          | sábado, 
          13 de
          octubre de
          2007 |  
						
							| Real Madrid y Barcelona se pelean por rosarino de 14 años 
 Buenos Aires- El juvenil futbolista rosarino Mauro Icardi, de 14 años, quien actualmente se desempeña en las  divisiones menores de Unión Deportiva Vecindario de España, está en la mira de los poderosos Barcelona y Real Madrid, que se disputan su incorporación.
 
 Según informó hoy el diario deportivo As, Icardi, “un virtuoso capaz de domesticar la pelota a su antojo y de reventar las redes rivales con sus remates imposibles”, es pretendido también por Espanyol, Valencia, Deportivo La Coruña y Sevilla.
 
 Además de las condiciones naturales y el talento a la hora de jugar que según As posee el argentino, también cuenta para aquellos clubes que Icardi quedará libre en junio próximo y que posee pasaporte italiano.
 
 “Estamos ante un futbolista que puede marcar una época si  mantiene su progresión”, señaló Sixto Alfonso, cazatalentos de Real  Madrid.
 
 En tanto, Josep Boada, coordinador del departamento de  scouting del Barcelona, rápido de reflejos y ante la posibilidad de que  su máximo rival le gane de mano en esta carrera vertiginosa por  apoderarse de las fichas de jugadores cada vez más pequeños, invitó  el mes pasado a Icardi a entrenarse durante cinco días en la entidad catalana.
 
 Allí, se dice, “enamoró a los técnicos de la casa, que  quisieron entablar negociaciones para su adquisición inmediata”.
 
 “Hasta el verano nos quedamos aquí (en Islas Canarias). El  niño tiene que ir a la escuela y no queremos que rompa de repente con  su círculo de amistades. Luego ya veremos qué ocurre. No nos  hemos comprometido con nadie”, aseguró Juan Carlos Icardi, padre del  incipiente proyecto de crack.
 
 Lo cierto es que “este Messi en ciernes”, como lo ha  catalogado la prensa española, ya superó los 400 goles en sus cinco años en  España y entre las condiciones que se le atribuyen están un buen  manejo de balón con ambas piernas, una gambeta mortal y una gran  madurez.
 
 “Antes del Vecindario, en Rosario, jugué en el Sarratea desde  los cinco años y allí también hice muchos goles”, contó el joven, quien recordó que debió trasladarse al Viejo Continente por  razones familiares.
 
 Por su parte, el padre compara y le pone paños fríos a la  situación: “Me recuerda a Batistuta. Pero sabe que debe seguir  creciendo. De él depende que se cumplan sus sueños de triunfar”. (DyN)
 
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