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domingo,
16 de
septiembre de
2007 |
Llega con falta y resto
Pablo Marini está más firme que Carlos Ischia en este partido aparte de los entrenadores. Y seguramente un mal resultado no afectaría su trabajo en lo inmediato, aunque sí lo haría a mediano plazo. Tiene el invalorable hándicap de haber ganado su clásico debut, aunque los hinchas rojinegros saben que hoy Newell’s precisa mucho más que eso. La tabla de promedios lo obliga y un eventual triunfo no lo relevará de esa responsabilidad, aunque le dará aire.
Marini hoy no es discutido por la gente, aunque puertas adentro del club se lo cuestionó por aquella rotación ante Arsenal y es mirado con atención. Además, si bien la racha negativa no es la misma que la de Central, hace cuatro partidos que no gana y su equipo dejó una imagen preocupante ante Tigre. Así que no está para tirar manteca al techo.
El técnico rojinegro se permitió abstraerse de la realidad del promedio para pensar sólo en este partido y hoy no le importa que se repita lo del torneo pasado, donde tras derrotar a Central, Newell’s pasó seis fechas sin alegrías. “Primero vamos a ganar el clásico y después analizaremos eso”, dijo.
Marini resolvió bien la cuestión de la localía. Y el escenario que avisora es el del festejo. que lo afirmaría. En el otro, el impredecible, prefiere no pensar.
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