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 domingo, 09 de septiembre de 2007  
Cuba estimula la importación masiva de artículos de consumo
La nueva política decidida por Raúl Castro busca mejorar el nivel de vida de los cubanos

La Habana. — Reproductores de DVD o consolas de juegos que durante mucho tiempo estuvieron fuera del alcance de los cubanos, así como carrocerías para autos y grupos electrógenos, podrán ahora ser traídas a la isla gracias a una serie de nuevas regulaciones que permiten ingresar esas y otras mercancías mediante el pago de aranceles.

   La apertura aduanera se suma a una serie de normas promovidas por el presidente interino Raúl Castro para hacer más eficiente el funcionamiento del país y más llevadera la vida de los cubanos.



“Son una gran cosa”. “¡Los DVD y videos son una gran cosa!”, exclama Magalis Díaz, una activa jubilada sesentona. “La programación de la televisión es muy limitada y estos aparatos son una buena alternativa, se pueden ver películas y novelas”, comenta.

   La isla se encuentra en un intenso proceso de flexibilización de sus controles de frontera, explicaron funcionarios del sector. Además, se levantaron las prohibiciones para la entrada de computadoras, equipos de VHS, motores completos y repuestos de autos, remolques y bicicletas eléctricas, entre otros. Algunos otros productos requieren de permisos especiales.

   “Hay una tendencia general en las aduanas del mundo que es a la mayor transparencia”, explicó Ramón Sánchez-Parodi, director de relaciones internacionales de las aduanas de Cuba, y para quien las autoridades se pusieron en consonancia con ese espíritu.

   En el último trimestre disminuyeron en un 90% los decomisos en aeropuertos y terminales marítimas y se elevaron las recaudaciones, aunque “ese no es el objetivo de las medidas”.

   A lo largo de este año hubo una verdadera transformación en el organismo de control, iniciada en enero con la puesta en funcionamiento de un sistema de pesas para evitar el cálculo “a ojo”, que generaba quejas y denuncias de corrupción, según reconoció el propio funcionario aduanero.

   El problema mayor era la Terminal 2 del aeropuerto capitalino José Martí, punto de arribo de vuelos procedentes de Estados Unidos con miles de cubanos residentes en el exterior, cargados de objetos para agasajar a la familia, que quedaban varados.



Imágenes y autos. En una segunda etapa, a partir de mayo un nuevo paquete de disposiciones levantó las limitaciones para que los viajeros trajeran a la isla “equipos reproductores de imágenes”, categoría que incluye reproductores de DVD y videojuegos.

   Finalmente en junio se sumó un nuevo listado de ingresos, como carrocerías y repuestos para autos. Mientras tanto, se elevó a 1.000 pesos convertibles (1.080 dólares) el valor de las mercancías a importar de manera no comercial por persona en cada viaje.

   Raúl Castro ha estado tratando de eliminar la excesiva burocracia y en el año que lleva en el gobierno se dictaron normas laborales para reorganizar los horarios de oficinas e industrias, se normalizó el pago del Estado a los agricultores privados para mejorar la producción de alimentos y se tomaron disposiciones para evitar la centralización en la distribución de leche.

   Entre los dirigentes del país hay coincidencia de debe lograrse una gradual mejora material de las personas. “Uno de los retos consiste en la necesidad de que la revolución se exprese en la vida material de las familias, donde debe sentirse el impacto de la recuperación económica, esto es en la comida, ciertas comodidades, los salarios”, expresó el líder juvenil e hijo de un vicepresidente Carlos Lage Codorniu.

   En lo que a la Aduana se refiere se espera ser “más equitativos, crear un entorno que elimine malos manejos e ilegalidades”, expresó Sánchez-Parodi.



Doble moneda. Como en Cuba existe una doble circulación monetaria, los nacionales que traigan estos objetos pagan los impuestos en pesos cubanos (un dólar por 21 pesos cubanos) —lo que hace de la importación de la mercancía algo muy económico— pero los extranjeros deben abonar en “pesos convertibles”, equiparables a dólares, haciendo oneroso el arancel.

   Según el documento JA-304, un memorándum de la aduana con instrucciones internas y al cual la agencia AP tuvo acceso, una consola Sony Play Station 2 está valorada por el Ministerio de Finanzas y Precios en 100 pesos convertibles, y el arancel en este caso es del 100%. Un ciudadano extranjero deberá pagar entonces 100 pesos convertibles en aranceles (108 dólares), pero si es cubano o residente permanente deberá abonar igual suma, pero en pesos cubanos (lo que significa apenas unos 4 dólares).



Misceláneas. Paralelamente, un pasajero puede traer hasta 100 kilos de las llamadas “misceláneas” —confecciones, calzados, etcétera— sin costo alguno, destacó Sánchez-Parodi.

   En este sentido quienes vienen a Cuba como turistas y no importan nada (o lo declaran temporal) tampoco tendrán que preocuparse de abonar aranceles.

   Según el director de aduanas, a raíz de estas medidas el nivel de quejas disminuyó entre los viajeros. En diálogo con AP varias personas confirmaron que el tránsito por la Aduana se había agilizado en sus llegadas en el último trimestre.
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