El arte del filete enriquece el tesoro cultural de Buenos Aires

Mercedes Ezquiaga / Télam

Una exposición que propone un recorrido por el presente y pasado del fileteado porteño, a través de tablas y objetos intervenidos por grandes maestros, jóvenes de la nueva generación y mujeres (incluidas recientemente en el oficio), será inaugurada mañana a las 19 en la Legislatura porteña, Perú 160.

   Unas 35 piezas componen la exhibición “El filete porteño”, que incluye desde fragmentos de carros antiguos, el primer soporte donde comenzó a aplicarse el filete, antes que en colectivos y camiones, hasta afiches de publicidad y objetos de consumo que exhiben los usos actuales de la disciplina.

   Se pueden ver trabajos tan diversos y dispares como el casco de una moto, un botinero, camioncitos a escala en miniatura, una radio antigua, una tapa de inodoro y numerosas tablas intervenidas con las características de esta disciplina surgida en los arrabales porteños a principios del siglo XX, traída por los inmigrantes.



Clasicismo y modernidad. “La idea es mostrar distintos aspectos del filete, desde la obra de grandes maestros como la del fallecido León Untroib (uno de los primeros fileteadores), hasta la mirada más contemporánea, que aporta en este caso el joven Alfredo Genovese, conocido por sus filetes en campañas publicitarias de grandes marcas de ropa”, contó la curadora de la muestra, Andrea Fontenla.

   Además, se incluyen trabajos de los reconocidos Enrique Arce, el retratista y animalista Alberto Pereira y de Ricardo Gómez, el primero que dio clases de fileteado a mujeres, incorporadas a esta disciplina hace muy poco tiempo y aquí representadas por Graciela Etcheverry, Patricia de Luca, Nora Abalo y Cristina Lara.

   “Es una muestra supercolorida y pintoresca; realmente es una fiesta de color”, prometió Fontenla sobre la exposición surgida con el impulso de la reciente declaración del filete como Patrimonio Cultural por la Legislatura porteña.

   El recorrido incluye también una breve reseña de la historia del filete, un panel que relata, con fotografías y textos, los diferentes pasos a la hora de filetear, los materiales, cómo preparar la tabla, el calcado, los pinceles y la cajita de pinturas de Untroib “un objeto maravilloso con una carga afectiva muy importante”, dijo Fontenla.

   No faltan los fileteados sobre tablas que permiten leer las famosas y divertidas frases que iban detrás de los camiones, muy vistas en las calles de Buenos Aires, un retrato en grande de René Favaloro, realizado por Pereyra, y la colorida figura de un quetzal, el ave de gran plumaje.



Del carro al mundo. “En un principio, el filete estaba pensado exclusivamente para el carro, camión o colectivo y no como una obra en sí misma —señaló Fontenla—. Después, empezó a tener autonomía pero con bastante reticencia en el mundo de la plástica, pero permaneció a lo largo de la historia y sigue presente, adaptándose a la época”.

   “Hay una nueva generación de fileteadores que le está dando una vuelta de tuerca y lo ha incorporado a la publicidad y a los objetos, como por ejemplo Alfredo Genovese, quien hizo una edición limitada de zapatilla Puma. Además, están llevando el filete al exterior”, contó.

   El viernes 24, a las 18, habrá una demostración de fileteado de Alberto Pereira. Marina Aizen, nieta de Untroib, tendrá a cargo visitas guiadas.

   Organizada por la Comisión para la Preservación del Patrimonio Histórico porteño, la muestra se podrá visitar hasta el 31 de agosto, de lunes a viernes de 12 a 20 en el salón de exposiciones de la Legislatura, Perú 160.

León Untroib, un maestro del filete. Una de sus obras.